Zapatero ofrece diálogo a los jueces pero advierte de que no les subirá el sueldo

• El presidente del Gobierno afirma que defenderá el interés general
• Quiere pensar que la amenaza de huelga no tiene que ver con el 'caso Tirado'
• Insiste que el Gobierno está en su derecho y deber de discrepar de la sanción del CGPJ
• Evita analizar la legalidad de la huelga y dice que los jueces saben cómo funciona el Estado
• Dice que no subirán más el sueldo del 5% previsto en los PGE
• Defiende que su Ejecutivo ha duplicado la inversión para modernizar la Justicia

El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ha asegurado que el Ejecutivo dialogará con las asociaciones de jueces para analizar su situación, pero les ha advertido de que su objetivo será defender el interés general y que no habrá subidas salariales por encima de las presupuestadas.

Entrevistado en Onda Cero, Zapatero ha estimado que las asociaciones que han anunciado protestas "podían haber pensado un poco más" antes de plantear un "diálogo de exigencia".

A pesar de destacar que, desde el caso de Mariluz las críticas del Gobierno a la sanción impuesta al juez Rafael Tirado, se han escuchado pronunciamientos judiciales que antes no se habían oído, ha dicho que quiere pensar que la actitud de las asociaciones "no tiene que ver" con ese enfrentamiento.

"Comprendo que los jueces puedan defender a los jueces, pero seguro que los ciudadanos entienden que el Gobierno debe defender ante todo el interés general", ha manifestado.

Los jueces, ha añadido, tienen una gran independencia que comporta "una responsabilidad y estar sometidos al debate de la opinión pública en democracia".

Ha insistido así en que el Gobierno está en su legítimo derecho y en su deber de discrepar públicamente de la sanción que el Consejo General del Poder Judicial impuso a Tirado y ha reiterado que habrá reformas legales para "precisar y acotar" las responsabilidades de los jueces, que son un poder independiente pero también servidores públicos.

Legalidad de la huelga

Zapatero no ha querido entrar a analizar la legalidad de una posible huelga judicial -"los jueces saben cómo funciona el Estado de derecho", ha dicho-, pero les ha asegurado que es más fácil el diálogo cuando detrás no hay la amenaza de "y si no, haremos esto".

A su juicio, el diálogo con las asociaciones judiciales debe comenzar con "un gran respeto institucional" y centrarse no sólo en los problemas de los jueces, sino en los problemas de los ciudadanos ante la justicia.

Ante las reivindicaciones salariales, ha recordado que el presupuesto aprobado por el Parlamento aumenta las retribuciones de los jueces en torno a un 5% y ha avanzado que "de ahí el Gobierno no se va a mover".

Las reivindicaciones planteadas, como los salarios o la instauración de la nueva Oficina Judicial, corresponden al poder legislativo, es decir, "es la soberanía popular la que toma las decisiones", ha recordado.

Zapatero ha subrayado que este Ejecutivo ha duplicado la inversión para modernizar las infraestructuras tecnológicas de la administración de Justicia y que es el que más ha incrementado las plazas de jueces y fiscales, por lo que "legítimamente" puede pensar que las protestas no son razonables.

No obstante, ha reconocido que puede haber necesidades y ha reiterado las disponibilidad del Gobierno a trabajar para mejorar la situación, pero, ha recalcado, siempre en defensa del interés general y teniendo en cuanta los avances logrados.

Zapatero ha calificado de "sensata" la posición del PP al escuchar que no comparte la amenaza de una huelga.