Los familiares de los militares del Yak piden que se siga investigando la identificación errónea
- Quiere que se conozca quién ordenó la repatriación de los cadáveres sin identificar
- El letrado pide 6 años de prisión para los tres mandos militares acusados
- Denuncia que ha habido encubrimiento y falsedad
- En esta jornada las partes presentan sus informes finales
El abogado de una de las acusaciones que ejercen las familias de las víctimas del Yak-42 ha pedido al tribunal que juzga el caso que se sigan investigando los hechos hasta que se conozca quién ordenó la repatriación de los cadáveres de los militares sin identificar.
Esta reclamación la ha hecho en la exposición del informe final en la Audiencia Nacional el letrado Leopoldo Gay, que pide 6 años de prisión para los tres mandos militares que están acusados de identificar erróneamente a 30 de los 62 muertos en Trabisonda (Turquía) el 26 de mayo de 2003.
Gay también ha pedido que se deduzca testimonio al considerar que durante la vista se han puesto de manifiesto hechos "que pueden haber incurrido en infracción penal".
El abogado ha recordado que "hay personas que tenían que haber acudido al juicio" porque habrían arrojado "más luz" al proceso, entre las que ha citado al entonces presidente del Gobierno, José María Aznar, el ex ministro de Defensa Federico Trillo o el jefe del Estado Mayor de la Defensa.
Además, ha indicado que hubo acciones posteriores que endurecieron el daño a las familias de las víctimas.
Encumbrimiento y falsedad de testimonio
En declaraciones posteriores a los periodistas, ha aclarado que ha habido encubrimiento y falsedad de testimonio, y que se trata de investigar a los responsables de la orden de regresar a España sin haber realizado las identificaciones.
No obstante, ha explicado que se pide que se continúe la investigación sin necesidad de que esta petición se dirija contra una persona determinada.
El juicio, que está previsto que finalice mañana, continuará esta tarde con los informes del resto de las partes.
El fiscal, que pide cinco años de cárcel para el general Vicente Navarro y cuatro y medio para los otros dos acusados, ha acusado al primero de "inventarse" 30 identidades de cuerpos porque "había mucha prisa".