Ingresan por agotamiento a Susan Boyle
- La escocesa ha alcanzado la fama por un concurso de televisión en Reino Unido
- Ha tenido que ser hospitalizada un día después de perder la final del programa
- Según los medios británicos, actuaba de forma extraña en el hotel donde se alojaba
- La cantante cautivó a los británicos por su voz y su sencillez en escena
La escocesa Susan Boyle, que saltó a la fama tras su participación en el programa "Britain's Got Talent", ha sido ingresada en una clínica privada por agotamiento, según informan los medios británicos.
Al parecer, Boyle fue llevada este domingo en ambulancia a la clínica Priory, en Southgate (norte de Londres), un día después de que la cantante -favorita para ganar la edición 2009 del programa "cazatalentos"- quedara en segundo lugar.
El personal de "Britain's Got Talent" se puso el domingo en contacto con la Policía porque Boyle, de 47 años, actuaba de manera extraña en el hotel londinense donde estaba hospedada.
"La Policía recibió una llamada hacia las 18.00 horas del domingo -20.00 hora española- desde un hotel del centro de Londres para que los médicos evaluaban a una mujer en virtud de la Ley de Salud Mental", señaló una portavoz de Scotland Yard.
"La mujer fue llevada de manera voluntaria en ambulancia a la clínica. Por petición de los médicos, la Policía acompañó la ambulancia", agregó la fuente policial. El grupo musical "Diversity", formado por varios adolescentes, fue proclamado ganador del programa el pasado sábado después de que el público votara por teléfono.
Agotamiento mental
Según los medios británicos, Boyle estaba agotada mentalmente tras su participación del sábado, en la que cantó "I Dreamed a Dream" (Soné un sueño), y los médicos le han aconsejado un periodo de descanso para recuperarse.
La escocesa saltó a la fama en todo el mundo tras su primera participación en "Britain's Got Talent", en el que sorprendió a la audiencia por su talento como cantante.
Desde que cantó por primera vez hace unas semanas, Boyle recibió numerosas ofertas para actuar, entre ellas una gira por EEUU en la que puede ganar unos 8,9 millones de euros (12,6 millones de dólares).
Boyle, desempleada, cautivó a los británicos con su voz y sencillez, si bien en los días previos a la final se sintió abrumada por la atención mediática por lo que los responsables de "Britain's Got Talent" decidieron "esconderla" en un lugar tranquilo y alejado de las cámaras.