Los uruguayos deciden hoy si mantienen la impunidad para los crímenes de la dictadura

• La ley de punto final mantiene la impunidad de los crímenes de la dictadura
• Alrededor de 3.000 uruguayos murieron o desaparecieron entre 1973 y 1985
• El país celebra elecciones generales sin que todavía haya un ganador claro

Los uruguayos deciden en un referéndum si mantienen la controvertida ley de punto final, llamada ley de impunidad por sus detractores, que dio inmunidad a los policías y militares que durante la dictadura cometieron violaciones de los Derechos Humanos, como torturas, secuestros y asesinatos.

La Ley de Caducidad de la Pretensión Punitiva del Estado fue instaurada por el Parlamento del país en 1986, un año después del final de la dictadura, 1973-1985, cuando los militares todavía mantenían un papel preponderante en la vida pública del país.

La Corte Suprema ha dictaminado que es inconstitucional y ha abierto la puerta a que puedan ser juzgados los responsables de la muerte y desaparición de alrededor de 3.000 uruguayos.

“La ley de punto final da inmunidad a los policías y militares de la dictadura“

Los partidarios de mandar al banquillo a los responsables del terror han reunido 300.000 firmas a favor de referéndum, y necesitan la mitad más uno de los votos para conseguir su objetivo.

En 1989 se celebró otro referéndum, entonces un 57% de los votantes optó por mantener la polémica norma, aunque los promotores de la nueva consulta afirman que el resultado fue fruto del miedo que todavía reinaba en la sociedad civil uruguaya.

Hasta la llegada al Gobierno del izquierdista Frente Amplio, los partidos tradicionales, el Blanco y el Colorado, respetaron a rajatabla la ley y nadie fue juzgado por los abusos de la dictadura.

Sin embargo, el presidente del país, el socialista Tabaré Vázquez, dejó fuera del paraguas de la ley los casos más sonados de violaciones de derechos humanos, tal como pedían desde 1986 organizaciones de derechos civiles y sindicatos.

Esta misma semana, la Justicia uruguaya ha condenado al ex dictador uruguayo Gregorio "Goyo" Alvarez a una sentencia de 25 años de prisión por "homicidio especialmente agravado" de 37 opositores y por un delito de "lesa humanidad".

El Frente Amplio podría perder en las generales

El país también celebra elecciones generales, que podrían suponer la salida del Frente Amplio del Gobierno, formación que lidera el ex guerrillero, ex ministro y senador, José 'Pepe' Mujica, que no tiene garantizado el 50% de los votos que le permitirían no tener que recurrir a una segunda vuelta.

De 75 años, su pasado turbulento y guerrillero, y su estilo heterodoxo, hacen de Mujica una figura de gran interés mediático. De hecho, no dudó en calificar a Argentina como un país de "reacciones de histérico, de loco, de paranoico". Sin embargo, su lenguaje provocador arrastra a las clases obreras y a los jóvenes.

“El Partido Nacional anuncia recortes sociales si gana las elecciones“

En frente tendrá al también veterano Luis Alberto Lacalle, que concurre por el conservador Partido Nacional. Entre 1990 y 1995 ocupó la presidencia del país, aunque ya era diputado desde 1971, cargo que tuvo que abandonar tras la llegada de la dictadura, lo que le empujó a pasar a la clandestinidad.

Lacalle ha prometido aplicar la "motosierra" a las políticas sociales impulsadas por Tabaré Váquez y "autoridad frente a la inseguridad ciudadana". Aunque sólo cuenta con el 29% de los votos en las encuestas, una alianza con el Partido Colorado podría darle el poder.

Ya durante su etapa de presidente demostró ser un fiel seguidor de las políticas neoliberales. Durante su mandato impulsó las privatizaciones en sectores como el transporte, la pesca y el gas, aunque promovió subidas de impuestos que fueron muy contestadas.