Enlaces accesibilidad

Obama envía 30.000 soldados para empezar la retirada en 2011

  • El objetivo es retirarse antes de que concluya su primer mandato
  • El Presidente anunciará esta noche su nueva estrategia para Afganistán
  • Obama establecerá criterios objetivos para transferir el poder a los afganos
  • La transferencia empezaría en julio de 2011
  • Enviará al país entre 30.000 y 35.000 soldados más
  • Las tropas se desplegarán antes del próximo mes de junio
  • Los primeros soldados partirán en Navidades
  • Pedirá a los aliados que contribuyan con al menos 5.000 soldados más

Por
Obama quiere que Europa comprometa más tropas en Afganistán

Más tropas, más rápido, para retirarse antes de que concluya su primer mandato. Obama anunciará esta noche, madrugada del miércoles en España, su nueva estrategia para Afganistán. El Comandante en Jefe de EE.UU. hablará desde la academia militar de West Point, en prime time y su discurso girará en torno a tres ejes para tratar de satisfacer a todos.

La nueva estrategia pasa por impedir que Al Qaeda vuelva a Afganistán y que los talibanes recuperen el gobierno, desplegar más de 30.000 soldados adicionales antes de lo previsto y fijar criterios para transferir el poder a los afganos y abandonar el país.

La estrategia es similar a la que empleó su predecesor, George Bush, en la guerra de Irak: una escalada militar primero para permitir la retirada después. Si se cumple el calendario, Obama llegaría a las elecciones presidenciales de noviembre de 2012 fuera de las dos guerras que heredó.

Una fecha de salida

Según fuentes oficiales citadas por la cadena CNN -la de mayor proyección internacional-, Obama se ha puesto como objetivo retirarse de Afganistán en el plazo de tres años. La agencia AP precisa que la transferencia de responsabilidades a las fuerzas afganas comenzaría en julio de 2011.

El portavoz de la Casa Blanca, Robert Gibbs, ha insistido en que el compromiso en Afganistán no es ilimitado y que no se trata de construir un Estado de la nada. Es la clave en la que hará hincapié Obama esta noche, en un esfuerzo para que el electorado liberal acepte una escalada impopular.

"El Presidente se toma muy en serio esta cuestión, le oiremos hablar específicamente sobre cuándo cree que podemos empezar la transición, el traspaso de poderes a las fuerzas afganas", ha señalado Gibbs.

El relevo pasa por dotar a las fuerzas afganas de efectivos y recursos, para que puedan asumir la seguridad del país. Desde el punto de vista militar, el premier británico, Gordon Brown, ha esbozado ante el Parlamento por donde van los tiros: "el Ejército afgano aumentará de 90.000 a 134.000 soldados y en seis meses, se duplicarán los efectivos de la policía".

Desde un punto de vista político, la nueva estrategia bascula en dos puntos. En Afganistán, se trata de erradicar la corrupción en el gobierno. En Pakistán, una relación más estrecha y más ayudas a cambio de que se ataquen los santuarios talibanes en Waziristán.

Más tropas, más rápido

El despliegue de los nuevos efectivos será más rápido de lo previsto. El nuevo contingente estará en Afganistán antes del próximo mes de junio. Los primeros soldados partirán en Navidades. El objetivo es doble. Atajar la contraofensiva de los talibanes y acelerar el entrenamiento de las fuerzas afganas.

Para "terminar el trabajo en Afganistán", Obama ha ordenado enviar más tropas a la región. La cifra oscila entre 30.000 y 35.000 efectivos, que se sumarían a los 21.000 desplegados desde el pasado mes de marzo. En conjunto, EE.UU. pasaría a contar con más de 100.000 soldados en Afganistán, el doble de los que heredó de Bush.

A las tropas de Estados Unidos hay que sumar los efectivos de los aliados: 42.000. Obama sigue hablando con los líderes mundiales para pedirles que contribuyan al nuevo esfuerzo. Se baraja una cifra de entre 5.000 y 10.000 soldados. El refuerzo conjunto se aproximaría pues a la petición del comandante estadounidense, el general Stanley McChrystal.