EE.UU. arresta a dos hombres relacionados con el intento de atentado en Nueva York el pasado 11-S
- Han sido capturados por agentes federales en la mañana de este viernes
- Habrían colaborado con el acusado de preparar un ataque con motivo del 11-S
EE.UU. ha arrestado a dos hombres en Nueva York en relación con el intento de atentado terrorista de Najibullah Zazi, un conductor de autobús que trabajaba en el aeropuerto de Colorado, el pasado 11 de septiembre, según ha informado el portavoz del FBI, Richard Kolko.
Los detenidos son Adis Medunjanin y Zarein Ahmedzay, que han sido capturados por agentes federales esta mañana en Nueva York.
Según informe el New York Times, los sospechosos viajaron con Zazi en 2008 a Peshawar, en Pakistán, donde los fiscales consideran que Zazi recibió formación de Al Qaeda sobre cómo construir una bomba de fabricación casera.
Ambos han estado bajo vigilancia como parte de la investigación de Zazi, al que conocieron en un instituto de Queens al que los tres asistieron.
El arresto de Medunjanin y Ahmedzay se produjo después de que el primer tuviese un accidente de coche y quisera huir del lugar a pie, según Kolko, que ha detallado que fue detenido en el hospital.
Armas de destrucción masiva
Zazi, un afgano de 24 años, está acusado de comprar productos químicos para cometer un atentado en Nueva York con motivo del aniversario del atentado contra las Torres Gemelas y fue detenido junto a su padre y Ahmad Wais Afzali, un imán de Nueva York.
Conductor de una lanzadera del aeropuerto de Denver, ha sido acusado de conspirar para "usar una o más armas de destrucción masiva" en un atentado terrorista en suelo estadounidense por un gran jurado de un tribunal federal de Nueva York.
Se acusa a Zazi de conspirar con otras personas sin identificar al menos desde el 1 de agosto de 2008 para cometer un acto terrorista, aunque según las fuerzas de seguridad estadounidense cualquier amenaza inmediata ha sido frustrada.
"Estamos investigando un amplio espectro de pistas sobre esta supuesta conspiración y continuaremos trabajando en todo momento para asegurarnos de que cualquier persona que estuviese implicada sea llevada ante la Justicia", aseguraba el fiscal general de Estados Unidos, Eric Holder, en un comunicado el pasado mes de septiembre.