La ONU decide enviar 3.500 "cascos azules" más a Haití

• El refuerzo es temporal y se suma a los 9.000 efectivos en la isla
• El Consejo de Seguridad aprueba el contingente por unanimidad

Una semana después del terremoto que ha devastado Haití, el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas ha aprobado por unanimidad el envío de 3.500 "cascos azules" más para garantizar la seguridad en la nación caribeña.

Ayer lunes, el secretario general de la organización, Ban Ki-Moon, informaba al Consejo del resultado del viaje que realizó el domingo a Haití y pedía 1.500 policías y 2.000 soldados más para hacer frente al pillaje y proteger la distribución de ayuda humanitaria. Las tropas estarían durante un periodo de seis meses, según avanzaba Ban Ki-Moon. 

Ban Ki-Moon se ha motrado agradecido a los 15 miembros del Consejo de Seguridad por su rápida respuesta: "es una señal clara de que el mundo está con Haití".

Una polémica estéril

Está por ver cuándo llegará el contingente, "tan pronto como sea posible", ha dicho Ban Ki-Moon, pero en todo caso, es la primera respuesta militar, coordinada a nivel internacional. Naciones Unidas ha sido criticada por su inoperancia sobre el terreno y ha sido Estados Unidos quien ha tomado el control de la seguridad y la distribución de la ayuda humanitaria.

Eso ha provocado el recelo de algunos países. Francia protestó por que no se permitió aterrizar a algunos de sus aviones. Venezuela ha llegado a decir que EE.UU. estaba ocupando militarmente la isla. Lo cierto es que el gobierno haitiano está desaparecido en la práctica y fue el propio presidente, René Pérval, quien pidió a Obama que enviara tropas.

La ONU a la sombra de Estados Unidos

Naciones Unidas dispone de unos 9.000 "cascos azules" en Haití desde 2004. Integran la Misión de Estabilización -MINUSTAH-, bajo el mando del general brasileño, Floriano Peixoto Viera. La reunión del Consejo de Seguridad ha sido a petición de México, que ha señalado que el máximo órgano de decisión de la organización debe "asumir un papel más activo como encargado del mantenimiento de la paz y la seguridad internacionales.

A pesar de que la ONU tiene 3.000 policías y militares en Puerto Príncipe, son los Estados Unidos los que han asumido el control de la situación. Obama ha enviado 10.000 efectivos a la isla. La Administración Federal de Aviación dirige el tráfico en el aeropuerto y el Ejército norteamericano ha fondeado el portaaviones Carl Vinson frente al puerto, impracticable por el seísmo. Está previsto que llegue el buque hospital USNS Comfort esta misma semana.