Aguirre, pillada: "Hemos tenido la suerte de poder dar un puesto a IU y quitárselo al hijoputa"
- La presidenta no se ha percatado de que estaba siendo grabada
- Comentaba con el número dos de su Gobierno los cambios en Caja Madrid
Aguirre pide disculpas y dice que no se refería a Gallardón sino a un consejero
La presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, ha sufrido este viernes un micrófono mal cerrado que ha permitido saber que se alegra de dar un puesto en Caja Madrid a IU quitándoselo así "al hijoputa", sin que quede claro a quién se refiere.
En la remodelación del Consejo de Administración de la entidad bancaria, Fernando Serrano, considerado afín a Alberto Ruiz-Gallardón, ha dejado el órgano y en su lugar ha entrado en representación de IU Rubén Cruz Orive.
Aguirre ha acudido a la localidad de Becerril de la Sierra, donde ha asistido a la firma de un convenio con alcaldes de la zona para promocionarla como vía turística.
Durante la firma, Aguirre charlaba discretamente con su vicepresidente, Ignacio González, ignorantes ambos de que su conversación era captada por los micrófonos no cerrados y grabada por los periodistas que cubrían el acto.
Aunque con fragmentos ininteligibles y diferentes sobreentendidos, la charla entre Aguirre y González versa sobre Caja Madrid, cuya asamblea general cerró este viernes más de un año de disputas con la elección de Rodrigo Rato como presidente al frente de una lista de consenso.
Pide perdón y dice que no se refería a Gallardón
Fuentes de la Comunidad de Madrid han asegurado a RTVE.es que la presidenta ha pedido disculpas por sus declaraciones y ha reconocido el error.
Las mismas fuentes quieren dejar claro que con esas declaraciones no se refería al alcalde de Madrid, Alberto Ruiz Gallardón, sino a un consejero de Caja Madrid, del que no dan el nombre.
Asimismo han dicho que "en ningún caso es cierta la interpretación de que se quita un puesto al PP para dárselo a IU". Añaden que para alcanzar el pacto de estabilidad en la caja era necesario "mantener las condiciojnes de IU, que pasaban por darles ese puesto".
Aguirre a González: "¿Y nosotros, qué armas tenemos?"
Ambos hablan del nuevo Consejo de Administración de la caja y de la comisión de control y salen varios nombres que es posible identificar.
Así, mencionan a nuevos nombres en ese Consejo, como los de Arturo Fernández, Javier López Madrid (ambos de CEIM), Carmen Cafranga (de la Fundación Pardo-Valcarcel) y Mercedes de la Merced (del PP).
También a alguno de los que han salido de ese órgano, como José Ignacio Echániz, que fue consejero de Sanidad en la época en la que Alberto Ruiz-Gallardón presidía la Comunidad.
"A Echániz lo ha quitado para poner a (ininteligible). Mucha gente se quejaba de que Echániz no se ocupaba", dice Aguirre en otro momento.
La líder popular en Madrid pregunta después a su vicepresidente: "¿nosotros que arma tenemos" y, tras unas palabras que no se entienden de González, menciona a los cuatro consejeros antes citados. Ignacio González agrega: "y alguien de IU".
A lo que Aguirre replica: "Yo creo que nosotros hemos tenido la inmensa suerte de poderle dar un puesto a IU quitándoselo al hijo puta, eh".
La guerra por Caja Madrid
Durante más de un año Caja Madrid ha sido objeto de fuertes polémicas hasta llegar al consenso culminado este viernes en torno a Rodrigo Rato. Uno de los órganos donde la tensión fue mayor fue en el seno de la comisión de control, cuyo presidente llegó a ser Fernando Serrano en sustitución de Pablo Abejas, persona de confianza del Gobierno de Esperanza Aguirre.
El principal enfrentamiento ha sido entre el Gobierno autonómico y el Ayuntamiento de Madrid, que incluso presentó un recurso judicial frente a la Ley de Cajas regional, que rebajó la representación de las corporaciones locales en la asamblea general de la entidad.
En algún momento González pareció suscitar el consenso para acceder a la presidencia de Caja Madrid en lugar de Miguel Blesa, pero su nombre no gustaba a sectores no vinculados con Aguirre.
Los más cercanos a Ruiz-Gallardón se dieron por satisfechos con Rato como candidato a primer ejecutivo de Caja Madrid, aunque el Ayuntamiento de la capital no ha mejorado su representación en la asamblea.
Las discrepancias llegaron a su máxima intensidad cuando el vicealcalde, Manuel Cobo, declaró a El País que lo que los seguidores de Aguirre hacían con Rodrigo Rato y su pretensión de dirigir Caja Madrid era "de vómito".
Eso ha llevado a la Comisión de Disciplinas y Garantías del PP a plantearse una sanción de un año sin militancia a Cobo, que aún puede alegar, por lo que no es definitiva.