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El presidente de la Audiencia Nacional niega una conspiración en el Supremo contra Garzón

  • Juanes dice que la querella deberá resolverse "con acuerdo a derecho"
  • Los fiscales progresistas acusan al TS de "criminalizar la discrepancia"

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El presidente de la Audiencia Nacional, Ángel Juanes, ha considerado inconcebible que exista una conspiración de magistrados del Tribunal Supremo en contra del juez Baltasar Garzón, imputado por prevaricación por declararse competente para investigar los crímenes del franquismo.

"Yo no puedo admitir, lo rechazo absolutamente, que ningún magistrado del Tribunal Supremo esté en ninguna conspiración. Eso sería para mí... no lo concibo, no lo admito, que personajes que están dedicadas al mundo del Derecho puedan estar en una conspiración de esa naturaleza no lo concibo", ha asegurado Juanes en declaraciones a Telecinco.

El presidente de la Audiencia ha dicho que la actuación de Garzón en el caso de las desapariciones durante la Guerra Civil y el franquismo es "una cuestión jurídica opinable" que "tendrá que resolverse con acuerdo a derecho".

En cualquier caso, Juanes ha subrayado que en este asunto "subyacen planteamientos ideológicos y políticos que evidentemente hacen que las posiciones prácticamente sean previas".

"El tema de la Guerra Civil desgraciadamente en nuestro país todavía levanta heridas, levanta ampollas, y efectivamente eso hace que haya unos posicionamientos previos a cualquier decisión", ha manifestado.

Los fiscales progresistas, contra el TS

Por su parte, la Unión Progresista de Fiscales (UPF) ha mostrado su solidaridad y apoyo al juez Garzón y ha considerado que la causa abierta contra él en el Tribunal Supremo por investigar los crímenes del franquismo supone "criminalizar la discrepancia jurídica".

En un comunicado, la asociación de fiscales dice que "la investigación de dichos delitos y su consideración como crímenes contra la humanidad resulta, desde nuestro criterio y con el debido respeto crítico a las opiniones jurídicas contrarias, completamente ajustada a la legalidad nacional e internacional".

"La actuación del juez Garzón de ningún modo puede considerarse jurídicamente infundada o arbitraria. Buena prueba de ello es que la decisión del juez central de instrucción recibió apoyo incluso por parte de algunos de los integrantes de los tribunales que han revisado por vía de recurso su actuación o que conocen del proceso en su contra", añade la UPF.

El comunicado hace también referencia al hecho de que la causa contra Garzón fuera abierta a raíz de las querellas presentadas contra él por el sindicato ultraderechista Manos Limpias, la asociación Libertad e Identidad y Falange Española de las JONS. Así, asegura que "la trayectoria profesional de este magistrado no se hace acreedora a ser acusado y sentado en el banquillo por iniciativa de organizaciones relacionadas con la derecha más extrema de este país, herederas directas de algunas de las implicadas en los crímenes investigados".