Dimite la jefa de la Iglesia protestante alemana, arrestada por conducir ebria
- Fue pillada con el triple de alcohol en sangre permitido en Alemania
- Su nombramiento fue polémico por ser la primera mujer en ocupar ese cargo
La presidenta del Consejo de la Iglesia Evangélica en Alemania (EKD) y obispo de Hannover, Margot Kaessmann, ha presentado este miércoles la dimisión de todos sus cargos eclesiásticos tras haber sido interceptada por la Policía el pasado fin de semana cuando conducía borracha.
Según la edición digital del popular diario Bild, Kaessmann asume con ello las consecuencias del caso, después de que el pasado sábado la Policía detuviera su automóvil tras saltarse un semáforo rojo por las calles de Hannover y se le determinara unos niveles de 1,54 miligramos de alcohol, triplicando los límites autorizados en Alemania.
"Cometí un grave error, que lamento, y dañé con ello mi cargo y la autoridad inherente a éste", ha afirmado en una declaración pública Kaessmann, de 51 años.
El Consejo Evangélico la apoya
El Consejo Evangélico ha expresado su apoyo a su presidenta, en un comunicado en que se hacía hincapié en que se la respaldaría, fuera cual fuera su decisión.
"El consejo deja en plena confianza a su presidenta la decisión sobre el camino que deberemos tomar juntos", señala un comunicado del máximo órgano de representación de los intereses de los 25 millones de fieles de la iglesia protestante y luterana en Alemania.
La máxima representante de la Iglesia Evangélica reconoció ya el martes en declaraciones a la prensa su error y arrepentimiento por haber conducido bajo los efectos del alcohol, mientras su oficina anunció que suspendía todos los actos de su agenda hasta que se aclare su futuro.
Su elección en octubre de 2009como jefa de la Iglesia protestante alemana suscitó polémica por ser la primera mujer en ocupar ese cargo y, además, divorciada.