El primer ministro tailandés, dispuesto a negociar con los "Camisas Rojas"
- Los "camisas rojas" querían más colaboración por parte de los ciudadanos de Bangkok
- Las manifestaciones comenzaron el pasado domingo
El primer ministro de Tailandia, Abhisit Vejjajiva, ha anunciado este jueves su disposicón a negociar con los manifestantes que, desde el pasado viernes se encuentran en Bangkok para exigir el cese del Gobierno y el anticipo de las elecciones.
"Si las protestas se desarrollan dentro de la ley, no me opongo a las negociaciones", ha declarado Vejjajiva durante un discurso televisado. Si esto no fuera así, el primer ministro ha declarado que sería "inaceptable" para él.
El líder tailandés ha manifestado que el Ejecutivo "está abierto a la participación" en unas hipotéticas conversaciones, aunque no ha detallado qué contenido tendrían.
La movilización callejera comenzó el pasado sábado (aunque los primeros manifestantes comenzaron a llegar a Bankok el viernes) y desde entonces el primer ministro no ha cedido a las presiones de los manifestantes, que ayer pintaron con sangre la verja de su residencia oficial en el centro de Bangkok.
Los "camisas rojas"
Los "camisas rojas" es el nombre con el que se conoce a los partidarios del depuesto ex gobernante Thaksin Shinawatra. Denuncian, además, que el actual Gobierno representa a la élite que residen en la capital frente a los pobres de las provincias rurales del noreste del país.
Los manifestantes se encuentan agrupados en el Frente Unido para la Democracia y contra la Dictadura, y afirman ser la voz de las masas ignoradas por las clases adineradas de Bangkok, que, según ellos, está representadas por el Partido Demócrata que encabeza Vejjajiva.
Por otro lado, los organizadores han anunciado este jueves que entretendrán a los manifestantes con música y baile para evitar un éxodo masivo después de que gran parte de los activistas regresara a sus casas, aunque el sábado tienen previsto regresar a las manifestaciones.
Las protestas han perdido intensidad desde la gran manifestación del pasado domingo, cuando 100.000 personas se congregaron en Bangkok y dieron un ultimátum de 24 horas al Gobierno para que adelantara las elecciones.
Estas jornadas constituyen las mayores manifestaciones de los "camisas rojas" desde la que protagonizaron en abril de 2009 y que acabó con dos muertos, 102 heridos, y la declaración del estado de excepción en Bangkok y cinco provincias vecinas.
Este año Tailandia atraviesa una profunda crisis política desde el golpe de Estado que derrocó en 2006 a Shinawatra, exiliado y prófugo de la justicia tailandesa.