El euro se debilita por las dudas sobre Grecia y Portugal, pero las bolsas europeas resisten
- La divisa europea cierra por debajo de 1,34 $, su mínimo en 10 meses
- La rebaja de la agencia Fitch a la deuda de Portugal abre un nuevo frente
- Las principales bolsas europeas, salvo Madrid, consiguen cerrar en verde
El euro ha tocado su mínimo de los últimos 10 meses y este miércoles su cambio con el dólar ha cerrado por debajo de 1,34 (1,3338 $, según el Banco Central Europeo). La debilidad de la moneda única europea se explica, según los expertos, por la posibilidad de que el Fondo Monetario Internacional (FMI) intervenga en la ayuda a Grecia junto a la Unión Europea.
"La posible intervención del FMI en la crisis de Grecia aumentó la presión al euro", ha señalado la experta en divisas del banco Helaba, Viola Stork. En su opinión, la intervención del FMI en la eurozona sería interpretada como un síntoma de debilidad, una opinión compartida, entre otros, por el miembro del consejo ejecutivo del Banco Central Europeo, Lorenzo Bini Smaghi.
A eso se unen las exigentes condiciones puestas sobre la mesa por Alemania para participar en el rescate europeo, que aumentan la desconfianza sobre la posibilidad de lograr un acuerdo en la cumbre europea prevista para mañana.
El euro también ha establecido este miércoles un nuevo mínimo histórico en su cotización con el franco suizo, al cambiarse a 1,4282 unidades. Este refuerzo de la divisa suiza frente al euro puede causar una nueva intervención del Banco Central de Suiza para evitar un excesivo el fortalecimiento de su moneda.
Nuevo golpe a Portugal
A la preocupación sobre Grecia, se han sumado este miércoles nuevas dudas sobre la situación de Portugal. La agencia Fitch ha rebajado la calificación de la deuda lusa desde "AA" a "AA-" debido a su elevado déficti público, una tendencia negativa que dificultará el acceso de Portugal a la financiación en los mercados internacionales y que le obligará a pagar intereses más altos en sus préstamos.
Según Fitch,el plan de austeridad aprobado por el Gobierno portugués es positivo para reducir el déficit del país (que a finales de 2009 se situó en 8,3% de su PIB), pero no será suficiente, en opinión de la agencia de calificación.
Después de publicarse la recalificación, el riesgo de la deuda portuguesa ha aumentado su diferencial respecto a los bonos alemanes, igual que ha sucedido con la de Grecia.
El gobierno griego necesita conseguir más de 16.000 millones de euros antes del 23 de mayo para refinanciar su deuda. Y ahora, el mercado le cobra unos intereses del 6,5%, más del doble de lo que le cuesta tomar prestado dinero en los mercados internacionales a Alemania o Francia.
Pendientes de Grecia
Esos resultados reflejan la espera de las Bolsas europeas y los mercados financieros, pendientes de que la Unión Europea concrete un mecanismo de ayuda a Grecia. Durante toda la jornada se están produciendo contactos para conseguir un acuerdo político que permita convocar con garantías una reunión de urgencia este jueves para definir la manera en que se efectuará el rescate. El gobierno de Alemania es el más reacio a ese encuentro que, señala, no considera necesario.
Si se logra acercar posiciones, se convocará al Eurogrupo este jueves para ratificar las medidas que se hayan acordado. Una cita que ha respaldado el Comisario para Asuntos Económicos, Olli Rehn, quien considera que "podría ser útil si se toman decisiones políticas".
Para que esto suceda será necesario vencer las reticencias de Alemania, que solicita que el Fondo Monetario Internacional participe en el rescate, que se haga mediante un sistema de ayudas bilaterales y que se endurezcan las normas de disciplina fiscal y financiera en la zona Euro.
Madrid, la Bolsa que más cae
La degradación de la deuda portuguesa se ha unido a la situación griega para arrastrar a algunas bolsas europeas. La Bolsa española ha sido la más afectada: el IBEX-35 ha cerrado este miércoles con una caída del 1,18%, la más acusada de todo el continente, y queda situado en los 10.866 puntos.
La Bolsa de Lisboa ha sufrido una fuerte caída por la mañana, justo al conocerse la rebaja de la calificación por parte de Fitch. Su índice principal, el PSI-20, ha llegado a caer un máximo del 2,52%, pero ha conseguido remontar y ha cerrado con una pérdida del 1%.
En el resto de parqués europeos ha predominado la volatilidad durante toda la sesión. Al cierre, París y el Eurostock 50 han registrado bajadas leves del 0,07% y 0,23%, respectivamente. Mientras que Londres (+0,07%), Fráncfort (+0,36%), Roma (+0,12%), e incluso Atenas (+0,78%) han conseguido terminar con números verdes.