Mueren al menos 35 insurgentes y dos soldados en un ataque a puestos de control en Pakistán
Al menos 35 supuestos insurgentes y dos soldados han muerto este lunes durante un ataque perpretado contra dos puestos de control en el noroeste de Pakistán, según han informado distintas fuentes oficiales al canal televisivo Dawn Tv.
Los combates se han producido en Orakzai, un punto de paso estratégico hacia Afganistán donde la guardia paquistaní combate desde hace semanas a grupos alineados con la insurgencia talibán.
Según ha informado a Dawn Tv el funcionario local Samiulá Khan, los insurgentes han atacado con proyectiles dos puestos de control ubicados cerca de los pueblos de Shireen Dara y Sangrana, e iniciaron un tiroteo que dio pie a un intenso combate contra las tropas.
Las autoridades encontraron tras el enfrentamiento a quince supuestos insurgentes muertos cerca de los puestos de control, según varios oficiales de inteligencia, que añadieron que los integristas se llevaron los cadáveres de otros veinte milicianos.
Una región inestable
Una fuente citada por el canal Geo ha cifrado en 38 el número de insurgentes fallecidos, y ha afirmado también que las tropas han destruido tres de sus escondrijos en las zonas de Shireen Dara y Sangrana.
Fuentes militares ya reivindicaron anoche las muertes en Orakzai de otros 23 supuestos insurgentes y la detención de nueve en combates con el Ejército, que también mantiene abierta una operación en la vecina demarcación de Khyber, fronteriza con Afganistán.
Los militares, sin embargo, están activos en casi todas las demarcaciones del cinturón tribal, un territorio inestable que nunca ha sido sometido al completo dominio del Estado y que sirve de refugio en la actualidad a insurgentes integristas y militantes de Al Qaeda.
En relación con Orakzai, el comandante de operaciones, Tahir Ikram, ha confesado a Geo que sus fuerzas han destruido muchos escondites desde el inicio de la operación, a finales de marzo, y que han matado a unos 300 insurgentes, incluidos varios líderes.
Los analistas creen que Orakzai, la única agencia tribal que no limita con Afganistán, se ha convertido en los últimos meses en refugio de muchos integristas que han huido de los combates en regiones cercanas.
Según un portavoz del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados, ACNUR, en torno a 1,3 millones de civiles continúan desplazados por los combates en Pakistán.
El pasado 3 de abril se producía la muerte de otros 20 insurgentes y un policía en el marco de esa lucha contra la insurgencia.