Sócrates considera "ridículo" pensar que la UE presionó a España o Portugal

• El primer ministro luso cree que todos los líderes se influyen mútuamente
• Explica y defiende las reformas estructurales en Portugal

El primer ministro de Portugal, José Sócrates, durante su intervención en el Foro ABC, celebrado este lunes en Madrid.

El primer ministro portugués, José Sócrates, ha asegurado este lunes que es "ridículo" pensar que la Unión Europea presionó a algunos de sus países para que adoptaran planes de ajuste, y ha subrayado la necesidad de decidir de forma conjunta qué medidas hay que tomar para crear instrumentos que prevengan futuras crisis.

Según Sócrates, el hecho de que se hayan producido conversaciones telefónicas entre los dirigentes -como la suya con la canciller alemana, Ángela Merkel, o la de los presidentes de España y Estados Unidos, José Luis Rodríguez Zapatero y Barack Obama- de forma paralela a los anuncios de ajustes en algunas economías, no implica que haya presiones de un lado u otro.

Durante un almuerzo del Foro ABC, el jefe del Gobierno portugués ha dicho que este esfuerzo "no es sólo de Portugal o de España, también lo hacen los demás países", ha apuntado, al recordar que la propia Alemania dio marcha atrás en su decisión de rebajar los impuestos, y no por eso se puede decir, ha bromeado, que él presionara a Merkel durante su conversación telefónica.

"Todos nos influimos unos a otros, pero no tengo ningún complejo de inferioridad ante los alemanes; hemos discutido y tomado una decisión en conjunto", ha asegurado.

Zapatero, su mejor amigo en la UE

Durante el almuerzo, al que ha asistido la ministra de Ciencia e Innovación, Cristina Garmendia, y el senador popular Manuel Fraga, Sócrates ha bromeado al ser preguntado por si se dejaría "fichar" por España, respondiendo que los españoles "no necesitan contratar un buen primer ministro, porque tienen uno de los mejores del mundo", remarcando que Zapatero es su "mejor amigo" dentro de Europa.

Sócrates ha explicado el plan de ajuste adicional que Portugal aprobó la semana pasada y ha explicado que ha contado con el apoyo de la oposición gracias a que su líder "mira la situación con responsabilidad y patriotismo". Además, se ha mostrado convencido de que los ciudadanos portugueses entenderán estas medidas, puesto que "no sería bueno" que el país no hiciese nada tras los riesgos a los que se ha enfrentado Europa en el último mes.

"Nuestro deber es hacer un esfuerzo adicional", ha insistido, para a continuación, explicar que con las medidas adoptadas por su Gobierno -como subir los impuestos o el IVA-, Portugal confía en reducir su déficit un punto más de lo previsto en 2010.

Gestión sin miedo al futuro

José Sócrates ha señalado que todos los jefes de Estado y primeros ministros se enfrentan ahora a un período de gobierno "muy difícil", que exige "coraje y determinación", porque "lo peor para los pueblos es una gestión del país basada en el miedo al futuro".

Ha recordado que, desde que llegó al Ejecutivo, ha realizado reformas estructurales en Portugal que han afectado a su Seguridad Social, al cálculo de las pensiones, al mercado laboral, a la administración del Estado o a la inversión en ciencia e innovación.

En concreto, ha destacado que Portugal es ya el país que lidera la administración electrónica en la UE, lo que permite una recaudación de impuestos "cien por cien" online, que las empresas puedan dar información de su gestión de una forma mucho más simple a todos los organismos del Estado, o que se puedan crear empresas desde un ordenador, consiguiendo que el 56% de las empresas creadas en 2009 se constituyeran en menos de una hora.

También ha resaltado el impulso que Portugal quiere dar a las energías renovables, y se ha mostrado convencido de que su país, junto con España, está en condiciones de liderar este sector dentro de la UE, potenciando, por ejemplo, los vehículos eléctricos.

Otro de los aspectos que ha destacado de su política es la reforma del mercado laboral que emprendió en 2008, en plena "tempestad" económica y con la oposición de los sindicatos, y que se ha traducido en un mercado laboral que, en términos de flexibilidad, se sitúa entre los de Alemania y Francia.

Por otro lado, Sócrates ha garantizado que los ajustes puestos en marcha por su gobierno no afectarán al AVE entre Madrid y Lisboa, que estará en marcha en 2013, tal y como estaba previsto.