Tres expertos bioquímicos dedicados a combatir el dolor, Príncipe de Asturias de Investigación
- Se trata de David Julius, Linda Watkins y Baruch Minke
- El jurado valora que trabajen en "uno de los grandes retos de la medicina"
- Esta candidatura conjunta ya optó al premio en 2009
Los bioquímicos estadounidenses David Julius y Linda Watkins, y el israelí Baruch Minke, considerados tres referentes mundiales en el campo de la neurobiología por liderar las investigaciones en la lucha contra el dolor, han obtenido el Premio Príncipe de Asturias de Investigación Científica y Técnica 2010.
El acta del jurado, a la que ha dado lectura su presidente, el jefe del servicio de Cirugía General del Hospital 12 de Octubre, Enrique Moreno, destaca que los trabajos de los premiados permiten "una comprensión más profunda de las bases celulares y moleculares de las diferentes sensaciones, en especial la del dolor".
De esta forma, se abren vías esperanzadoras para paliar un mal que afecta a la calidad de vida de millones de personas "y que ha sido, desde siempre, uno de los grandes retos a los que se ha enfrentado la medicina", añade el acta del jurado.
Esta candidatura conjunta se ha impuesto en la última votación a la de los otros dos finalistas, el genetista estadounidense Fred H. Gage y su compatriota Rita Colwell, microbióloga que ya había sido candidata a este galardón en otras ocasiones.
Un trabajo que permitirá desarrollar medicamentos más efectivos
Los galardonados, que ya optaron al premio en la edición de 2009, han descubierto las causas y mecanismos por los que se produce y percibe el dolor así como otras sensaciones como el frío, el calor o el gusto.
El doctor David Julius trabaja actualmente en el departamento de Farmacología Celular y Molecular de la Universidad de California en San Francisco. Por su parte, Linda Watkins, profesora de Psicología de la Universidad de Colorado, se ha centrado en investigar el dolor patológico. Mientras, Baruch Minke, de la Universidad Hebrea de Jerusalén, ha destacado en los últimos tiempos por sus trabajos sobre las mutaciones genéticas centradas en la vista.
Julius es pionero en el análisis molecular de los nociceptores y ha identificado el TRPV1 como receptor neuronal de estímulos nocivos; Watkins ha descubierto la participación de las células gliales en los mecanismos del dolor patológico y Baruch Minke ha caracterizado las bases de la percepción y de la señalización sensorial.
Sus investigaciones, destaca también el tribunal, han permitido identificar dianas moleculares a las que dirigir una nueva generación de medicamentos específicos para el tratamiento selectivo de diferentes tipos de dolor, especialmente el crónico.
La candidatura había sido propuesta por el neurobiólogo mexicano Ricardo Miledi, que obtuvo el galardón en 1999, y recibió el apoyo de seis investigadores de los ámbitos de la Fisología, la Medicina y la Química distinguidos con el Premio Nobel.
El jurado apostaba por premiar al campo de la medicina
Momentos antes de iniciarse las deliberaciones de este martes, tras las que se decidieron las tres candidaturas finalistas, varios miembros del jurado ya apuntaron su preferencia por el campo de la medicina a la hora de decidir el galardón.
35 candidaturas de 17 países optaban al galardón que ha recaído en los últimos años, entre otros, en los pioneros en el desarrollo de Internet Lawrence Roberts, Robert Kahn, Vinton Cerf y Tim Berners-Lee; la etóloga Jane Goodall; el neurólogo Antonio Damasio y los ingenieros Raymond Samuel Tomlinson y Martin Cooper, que lo obtuvieron en 2009 por su aportación al desarrollo del correo electrónico y la telefonía móvil.
El premio, dotado con 50.000 euros y la reproducción de una estatuilla diseñada por Joan Miró, será el tercero que se falla en esta trigésima edición de los Premios Príncipe de Asturias tras los de Artes (Richard Serra), Ciencias Sociales (Equipo arqueológico de los Guerreros y Caballos de Terracota de Xian) y Comunicación y Humanidades (Alain Touraine y Zygmunt Bauman).