La primera obispa de la Iglesia luterana dimite por ocultar los abusos a menores de un cura

• Maria Jepsen fue la primera obispa en 1992 al dirigir la diócesis de Hamburgo
• Le acusas de silenciar en 1999 el caso de un sacerdote que abusó de menores

Maria Jepsen, en el anuncio de su dimisión.

La primera mujer elegida obispa luterana, la alemana Maria Jepsen, acusada de ocultar en 1999 un caso de abusos sexuales a niños por parte de un sacerdote, ha anunciado en una conferencia de prensa que abandona su cargo.

"Mi credibilidad ha sido puesta en duda. A partir de ahora no me veo en la situación de seguir proclamando el feliz mensaje, como prometí en mi ordenación y en mi designación como obispa ante Dios y la comunidad", ha señalado Jepsen.

Jepsen fue elegida en 1992 obispa de Hamburgo y era la primera mujer en el mundo en ocupar este cargo en la Iglesia luterana.

El pasado mes de mayo fue acusada de ocultar un caso de abusos sexuales a menores en Ahrensburg (norte de Alemania).

Jepsen, según la denuncia de una antigua colaboradora y la hermana de uno de los menores que sufrió abusos, trasladó al sacerdote Dieter K. de Ahrensburg a un reformatorio en Schleswig.

Al mismo tiempo, el sacerdote trabajó en ese periodo como profesor de Religión en un instituto de la zona, sin que sus responsables fueran informados de sus antecedentes.

De acuerdo con las denuncias de algunas de las víctimas, el sacerdote Dieter K. habría sometido a abusos sexuales a menores al menos desde los años 80.

Cuando se conoció el caso de 1999 en mayo pasado, Jepsen afirmó en una entrevista que nunca supo el motivo del traslado de Dieter K.

Testimonios contrarios a su versión

Sin embargo, un antiguo alto cargo de la Iglesia luterana en Ahrensburg, la hoy jubilada Heide Hemse, le escribió una carta y le amenazó con contradecir públicamente a la obispa si repetía no saber nada del tema. Conforme a la versión de Hemse, ésta informó personalmente a la obispa Jepsen en 1999 durante un encuentro en un convento. También en 1999 la hermana de una de las víctimas, según ha revelado, se dirigió en persona a Jepsen durante un congreso en Lübeck (norte del país) y le explicó los abusos sexuales del sacerdote. La obispa Jepsen negó que recordara estas dos conversaciones y aseguró que, de conocer los abusos, habría reaccionado inmediatamente. Sin embargo, más tarde se supo que en una reunión en la que participó la religiosa el 1 de noviembre ésta pidió a sus colaboradores información sobre el caso. "La obispa Jepsen preguntó si el pastor K. tenía relaciones íntimas con mujeres", se puede leer en el acta de ese encuentro. Jepsen es el tercer obispo alemán que anuncia este año su abandono del cargo, después de que en abril el entonces obispo católico de Ausburgo Walter Mixa ofreciera su dimisión a Benedicto XVI, tras recibir críticas durante semanas a raíz de conocerse supuestos abusos a menores. Asimismo, en febrero, la entonces obispa protestante de Hannover, Margot Kaßmann, 

La obispa Jepsen preguntó si el pastor K. tenía relaciones íntimas con mujeres

presentó su dimisión tras dar positivo en un control de alcoholemia