Los mercados siguen desconfiando de España y la prima de riesgo sube a los 250 puntos básicos

• Los inversores temen que el déficit de las CC.AA. se eleve
• El Ibex-35 baja en línea con el resto de las bolsas europeas

Los mercados siguen desconfiando de España y la prima de riesgo sube a los 250 puntos básicos

La prima de riesgo española, que se mide con el diferencial entre el interés del bono español a diez años y el alemán del mismo plazo, se ha colocado en los 250 puntos básicos,  pero ha llegado a marcar los 260 media hora después de la apertura del  mercado. La rentabilidad de la deuda española ha subido hasta el 5,513%.

Así, la prima de riesgo española se alejaba del máximo anual (270  puntos básicos) que  alcanzó el 10 de enero (al cierre del mercado).

El resultado de las elecciones municipales y autonómicas no ha servido para disipar las dudas de los mercados y la rebaja de la calificación de la deuda griega, con la inquietud que suscita no han dado un respiro a la prima de riesgo española, que empieza esta semana con la misma agitación con que terminó la precedente.

De este modo, en los últimos siete días el diferencial de los bonos españoles ha experimentado una escalada sin tregua, al pasar de los 222 puntos básicos del pasado lunes a los 250 puntos básicos actuales, en un entorno de incertidumbre respecto a la posibilidad de una quita de la deuda griega y el escándalo que sacudió el FMI.

Grecia, por encima del 16%

En cuanto al resto de países periféricos, la prima de riesgo de  Grecia se situaba en los 1.372 puntos básicos, la de Irlanda en los 753,  y la Portugal en los 631 puntos básicos.

La prima de riesgo de Italia se situaba en los 179 puntos básicos.

Los seguros de impago de deuda (credit default swap o CDS) referentes a España se encontraban en 251.210 dólares anuales para cubrir la posibilidad de impago de 10 millones de dólares en bonos españoles a 10 años y se convertían en los décimos más caros del mundo.

Bolsas a la baja

El principal indicador de la bolsa española, el Ibex-35 ha cerrado la sesión con una caída del 1,41% hasta los 10.082,70 puntos, lastrado por los bancos y los grandes valores y en línea con los abultados descensos del resto de mercados europeos.

El principal indicador de la bolsa italiana, el FTSE MIB, ha perdido el 3,32% en su primer día de negociación después de que el sábado la agencia de medición de riesgos Standard & Poor's (S&P) rebajara de estable a negativa la perspectiva de la calificación crediticia del país. También en números rojos han acabado la bolsa de París 2,10% y el FTSE londinense (1,89%).