Nuevo máximo de la prima de riesgo en 487 puntos con la Bolsa en niveles de 2003
- Atenas se desploma un 3,62%, la mayor caída de las plazas europeas
- El Ibex-35 baja un 1,6% y aguanta los 6.700 puntos por los pelos
La prima de riesgo
El diferencial con el bono alemán a diez años, conocido como prima de riesgo, es la distancia entre la rentabilidad de la deuda germana, la más sólida de la zona euro, y otro país medida en puntos porcentuales, es decir, 100 puntos básicos equivalen a un 1%.
Alemania se considera un pagador seguro y sin riesgos. El resto de países deben ofrecer una mayor remuneración para que los inversores asuman el riesgo de tener otro bono, en lugar de comprar deuda alemana.
Cuando Grecia estornuda la eurozona se constipa. Los mercados siguen inquietos por la inestabilidad política en Grecia que volverá a celebrar elecciones en junio y capeará el temporal hasta entonces con un gobierno de coalición.
La prima de riesgo española ha cerrado en 487,68 puntos básicos, un nuevo récord desde la creación del euro, que supera el cierre del lunes, cuando terminó en 476,94 puntos. El diferencial del bono español con el alemán se queda cada vez más cerca de 500 puntos, un nivel que dificulta la financiación y estrangula la economía.
El diferencial entre la rentabilidad que ofrecen los bonos españoles a 10 años y los títulos alemanes del mismo vencimiento ha elevado el interés de los españoles hasta el 6,3%.
La Bolsa de Atenas ha sufrido el mayor castigo con un batacazo del 3,62%. El parqué ateniense logró frenar las perdidas, que llegaron a superar el 5% minutos después de conocerse el fracaso de los intentos de formar gobierno. El sector bancario heleno perdió de media un 4,9%.
Italia también sufre la desconfianza de los inversores, la prima de riesgo italiana supera los 440 puntos básicos y Milán es una de las plazas más bajista del viejo continente con una caída del 2,56%.
El Ibex-35 vuelve a 2003
El Ibex 35 ha caído un 1,6% y se ha quedado a siete décimas de perder la cota de los 6.700 enteros golpeado por la crisis griega, y ha marcado así el nivel más bajo desde mediados de 2003, tras encadenar tres jornadas consecutivas en números rojos.
Los números rojos eran la tendencia generalizada en toda Europa. Fráncfort cerraba con una caída del 0,79%, París bajaba un 0,61%, mientras que Londres retrocedía un 0,51%.
Una vez más, los valores del sector bancario han sido los más castigados por los inversores, con recortes de en torno al 3% en el caso de Santander y BBVA, después de las nuevas exigencias de provisiones marcadas por el Gobierno y la petición a España del Eurogrupo para que se realice cuanto antes una auditoría independiente del sistema financiero español.
El ministro español de Economía, Luis de Guindos, ha asegurado que la banca española no tiene "nada que ocultar", por lo que el Gobierno está "a favor de poner luz y taquígrafos en ese ejercicio de transparencia" que van a suponer las auditorías que se realizarán en menos de dos meses y que van a contar con la participación del Banco Central Europeo (BCE).
El farolillo rojo de la sesión bursátil ha sido IAG, fruto de la fusión de Iberia y British Airways, con un retroceso del 6,35%.
En el mercado de divisas, el euro sigue perdiendo posiciones respecto al dólar y el cambio entre ambas monedas ha quedado establecido en 1,275 unidades al cierre de los mercados europeos.