El Tesoro capta 3.528 millones, pero sube mucho el interés a 3 meses
- La rentabilidad media en las letras a 3 meses sube hasta el 1,415%
- En los títulos a 6 meses, el rendimiento ofrecido baja hasta 2,023%
Tipos de interés en una subasta
En una subasta de deuda, el Tesoro clasifica las ofertas que recibe por los títulos que emite (letras, bonos y obligaciones). Entonces elige los intereses más bajos para pagar lo menos posible.
Desde la puja más baja, el Tesoro acepta ofertas en varias fases hasta completar su objetivo de colocación en esa subasta (por ejemplo, entre 1.000 y 2.000 millones de euros).
El tipo de interés marginal es el de la puja más alta aceptada. El tipo de interés medio se calcula haciendo la media de todas las ofertas aceptadas.
El Tesoro ha conseguido en el mercado 3.528 millones de euros en el mercado de deuda -un poco por encima del máximo marcado-, aunque lo ha hecho pagando un interés más alto que en septiembre en las letras a más corto plazo, las que vencen dentro de tres meses. Esto indica los temores de los inversores ante la incertidumbre que rodea la economía española y su capacidad para cumplir con sus compromisos a más corto plazo si no solicita ya un nuevo rescate.
En concreto, el organismo dependiente del Ministerio de Economía ha colocado 967 millones de euros en letras a 3 meses, pero ha tenido que ofrecer una rentabilidad media del 1,415%, por encima del 1,203% de la subasta equivalente de septiembre. En lo que respecta al interés marginal- el que se paga en la puja más alta de las aceptadas-- ha subido hasta el 1,45%, frente al 1,250% pagado en la subasta anterior.
La demanda en este papel ha subido mucho respecto a la que hubo en la subasta del mes pasado, ya que las peticiones de compra han más que cuadruplicado la oferta (4,32) mientras que en septiembre solo la duplicaron.
En las letras a 6 meses, se han logrado 2.560 millones de euros. Aquí se ha conseguido rebajar un poco el rendimiento ofrecido a los inversores, ya que el tipo medio se ha quedado en 2,023% frente al 2,213% de septiembre. En el interés marginal ha bajado hasta el 2,100% desde el 2,3% precedente.
En este caso, la demanda ha mejorado algo la de la puja previa, ya que ha duplicado la oferta del Tesoro, mientras que en septiembre no llegó a ese nivel (1,8).
Con excepción de la colocación de este martes de letras a tres meses -donde ha subido la rentabilidad-, el Tesoro ha conseguido pagar menos en todas las emisiones de este mes. También ha conseguido superar los niveles máximos marcados en todas las subastas, lo que le permite situarse en una buena posición para afrontar los vencimientos del mes de octubre, que superan los 29.000 millones de euros.
En el mercado secundario de deuda, la prima de riesgo de España -que mide el sobrecoste que los inversores exigen por la compra de deuda soberana española frente a la alemana, considerada más segura- ha caído desde los más de 440 que marcaba a comienzos de octubre hasta rondar los 380 en las últimas semanas.
Rumores de nuevo rescate
Con esa reducción, los mercados parecen descontar ya que España va a pedir un nuevo rescate. La pasada semana el Gobierno filtró a la prensa extranjera su disposición a solicitar una nueva ayuda con el fin de que el Banco Central Europeo active su programa de compra de deuda. El Ejecutivo aseguró entonces que la posibilidad de intervención del BCE bastaría para mejorar el coste de financiación de España en los mercados, con lo que no sería necesario recurrir al nuevo préstamo europeo.
Además, Moody's ha evitado hasta ahora rebajar la nota de España a bono basura, porque ha descontado que se va a solicitar ese nuevo rescate. Sin embargo, este lunes, esa misma agencia de calificación sí ha degradado a bono basura a dos comunidades autónomas, Andalucía y Extremadura.
Entre los elementos que podrían jugar en contra estaría la negativa de la canciller alemana, Angela Merkel, a una recapitalización directa retroactiva de la banca española, así como la revisión realizada por Eurostat del déficit de España en 2010 y 2011, que los eleva al 9,7% y 9,4%, respectivamente, y arroja dudas sobre si el Gobierno será capaz de reducirlo al 6,3% en 2012.