Un tribunal español se declara competente para juzgar una demanda de Repsol contra YPF
- La petrolera española acusa a su antigua filial de competencia desleal
- La causa es Vaca Muerta, yacimiento descubierto bajo control de Repsol
- Esa demanda se unificará con otras contra Chevron y Bridas
El Juzgado de lo Mercantil número 1 de Madrid se ha declarado competente para dirimir la demanda por competencia desleal presentada por Repsol contra YPF por ofrecer a terceros la explotación del yacimiento de Vaca Muerta, descubierto cuando la petrolera española poseía la mayoría del capital de la argentina, antes de que en abril del año pasado esa participación fuera expropiada por el Gobierno argentino.
Según informa la agencia Reuters, ese mismo tribunal -que en octubre pasado admitió a trámite la demanda de Repsol- ha desestimado una petición de declinamiento presentada por YPF, que argumentaba que este caso no podía juzgarse en España por falta de jurisdicción.
Además, la agencia de noticias anglosajona explica que el juzgado madrileño ha comenzado los trámites para unificar en la misma demanda las presentadas contra la estadounidense Chevron y la argentina Bridas, ya que firmaron con YPF dos acuerdos por los que cada una de ellas se comprometía a invertir 1.500 millones de dólares en Vaca Muerta.
Repsol ya ha presentado demandas contra ambas compañías por sus pactos con YPF: contra Chevron el pasado diciembre y contra la empresa argentina un mes más tarde.
Una compensación económica pendiente
Según los analistas consultados por Reuters, la decisión judicial de este jueves puede complicar los intentos de Argentina de conseguir inversiones internacionales, al tiempo que aumenta la presión sobre el Gobierno de Cristina Fernández para fijar la compensación a Repsol por la expropiación de YPF. Según los distintos cálculos, el valor de lo expropiado podría oscilar entre los 7.500 y los 90.000 millones de dólares.
A finales de junio, Repsol rechazó una propuesta argentina que valoraba en 5.000 millones de dólares (3.823 millones de euros) esa reparación e incluía la creación de una sociedad -en la que la española tendría una participación del 47% para explotar una pequeña parte de Vaca Muerta- y un pago en bonos que se exigía fuera reinvertido en dicha sociedad.
El Ejecutivo argentino tomó el control de YPF con el argumento de que la empresa española invertía poco en su filial, pero Repsol rechaza esas críticas y asegura haber perdido 10.500 millones de dólares con la intervención estatal.
Los documentos aportados por Repsol a la causa muestran que, en los meses anteriores a la nacionalización, firmó 15 memorandos de entendimiento con potenciales inversores interesados en participar en Vaca Muerta. En este rico yacimiento situado en la Patagonia argentina, la empresa española planeaba invertir 25.000 millones de dólares anuales, ya que su explotación es complicada porque el petróleo y el gas se hallan en vetas y debe extraerse por el método de fractura hidráulica o fracking a través de la apertura de múltiples pozos.
La petrolera española ha mulplicado sus frentes judiciales contra la actuación de Buenos Aires, desde los tribunales argentinos -con un recurso de inconstitucionalidad- hasta los de arbitraje internacional.