Standard & Poor's eleva la nota de la deuda de España de BBB- a BBB con perspectiva estable
- La agencia revisa las perspectivas de crecimiento hasta el 1,6% en 2014-2016
- También mejora la nota de la deuda a corto plazo de A-3 a A-2
- De Guindos cree que servirá para atraer a más inversores asiáticos
- Fitch sube la calificación de Grecia de B- a B con perspectiva estable
Las notas de las agencias
La triple AAA es el símbolo de los mejores productos, aquellos con los que el inversor tiene la plena seguridad de que recuperará su inversión.
Si las agencias consideran que hay riesgo de que el emisor no pague, la nota se rebaja: AA, A, BBB, BB, B, CCC... hasta la D (con escalones intermedios, indicados por los símbolos + y -). El límite crítico lo marca la nota BBB: por debajo de esa nota, se considera que se trata de un producto especulativo, es decir, bonos basura.
La agencia de calificación crediticia Standard & Poor's (S&P) ha elevado este viernes la nota de la deuda soberana de España un escalón de BBB- a BBB, con perspectiva estable, citando la mejora en las expectativas económicas del país.
"Las previsiones son estables, reflejando nuestra interpretación actual de que los riesgos para los ratings de España permanecerán equilibrados durante los próximos dos años", ha indicado S&P a través de un comunicado. También ha mejorado la calificación de la deuda a corto plazo de A-3 a A-2.
Asimismo, la agencia de calificación crediticia ha elevado hasta el 1,6% su perspectiva de crecimiento del PIB entre 2014 y 2016, cuatro puntos porcentuales por encima de su anterior previsión, en respuesta a las reformas estructurales acometidas.
La última vez que Standard & Poor's revisó la calificación de España fue el pasado 29 de noviembre de 2013, cuando confirmó la nota BBB-, un escalón por encima del grado de especulación o bono basura, pero mejoró su perspectiva de negativa a estable.
S&B sigue los pasos de Moody's y Fitch, las otras dos grandes agencias de calificación, que en sus últimas revisiones han elevado la nota de España en un peldaño.
En concreto, Moody's elevó el pasado mes de febrero en un escalón la nota de la deuda soberana española, desde Baa3 a Baa2 con perspectiva positiva. Por su parte, Fitch subió también en un escalón el rating de España, desde BBB a BBB+ con perspectiva estable.
De Guindos cree que atraerá a más inversores asiáticos
El ministro de Economía y Competitividad, Luis de Guindos, ha destacado la importancia de la subida de nota de S&P, ya que además de poner en relieve la mejora de la economía española va a atraer a más inversores institucionales, que se basan en las calificaciones que dan las agencias para llevar a cabo sus operaciones, especialmente asiáticos.
En la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, De Guindos valora la subida del rating de España como una "decisión importante", ya que, además de seguir la estela que está marcando el mercado, va a permitir que una serie de inversores ahora sí puedan adquirir deuda española.
Otra de las consecuencias, según el ministro, será su efecto en la calificación de otros emisores españoles de deuda tanto públicos como privados, ya que una subida de la nota soberana se suele trasladar a otras administraciones, entidades financieras o empresas del país que emiten deuda.
Fitch mejora la nota de Grecia
Por otra parte, la agencia Fitch ha mejorado la calificación de la deuda griega en un escalón (de B- a B) con perspectiva estable, debido a la mejora de su déficit y a que el riesgo de liquidez de su deuda soberana se ha reducido, aunque aún la mantiene en el nivel de bono basura.
Fitch entiende que las condiciones económicas en Grecia han mejorado ligeramente, tanto por la reducción de su déficit general como por la consecución de un superávit primario en las cuentas de las administraciones públicas, lo que califica de objetivo clave en el programa de asistencia de la UE y del FMI.
La calificadora entiende que el riesgo de liquidez soberana a corto plazo se ha reducido y destaca el hecho de que Grecia ha empezado a acceder a los mercados para financiarse. Destaca que Grecia registró su primer superávit por cuenta corriente en 2013, del 0,7% del PIB, gracias a factores estacionales como menores importaciones y las ayudas a su deuda, pero también a un mayor dinamismo del turismo, entre otras.
Fitch señala que la economía griega está tocando fondo y aunque el riesgo político sigue siendo alto, su escenario es que la recuperación sea gradual en 2014 y se alcancen crecimientos del 2,5% en 2015.