El Ecofin aprueba endurecer las reglas para evitar que las multinacionales eludan impuestos

• Los países deberán aplicar la reforma antes del 31 de diciembre de 2015
• Si los beneficios no se gravan en el país de una filial, se hará en el de la matriz
• También respalda sin cambios las recomendaciones de Bruselas a España

El ministro de Economía español, Luis de Guindos, con su homólogo belga, Koen Geens, durante la reunión de este viernes.

Los ministros de Economía de la Unión Europea han alcanzado este viernes un acuerdo político para endurecer las reglas tributarias con el objetivo de evitar que las multinacionales eludan el pago de impuestos recurriendo a la ingeniería fiscal.

El compromiso ha sido posible después de que Malta haya levantado la reserva que tenía sobre el texto, ya que las normas sobre fiscalidad requieren el apoyo unánime de los Estados miembros. Los países tienen ahora de plazo hasta el 31 de diciembre de 2015 para incorporar los cambios a sus respectivas legislaciones nacionales.

De esta forma, los Veintiocho dan luz verde a la propuesta de la Comisión Europea para reformar la denominada directiva "matriz-filial" con el objetivo de cubrir una laguna que permite a los grupos de empresas aprovechar las asimetrías entre las reglas fiscales nacionales para escapar al impuesto sobre sus beneficios.

Evitar la doble no-imposición

La directiva actual obliga a los Estados miembros a conceder a la matriz de una empresa una exención fiscal sobre los dividendos que recibe de las filiales establecidas en otros países de la UE para evitar una doble imposición. No obstante, en algunos casos, los países donde las filiales están establecidas consideran estos pagos como el reembolso de préstamos fiscalmente deducibles, por lo que el resultado es, según Bruselas, que los pagos entre la filial y la matriz no se gravan en ninguna parte. Esto es lo que se conoce como doble no-imposición.

Con la reforma aprobada este viernes por el Ecofin, si un pago efectuado a título de un crédito híbrido es fiscalmente deducible en el Estado miembro de la filial, deberá ser gravado en el país de la matriz. Con esta medida, las multinacionales ya no podrán planificar sus pagos intragrupo para beneficiarse.

El Ejecutivo comunitario había propuesto además introducir en la directiva una regla común anti-abuso. Ello permitirá a los Estados miembros, según Bruselas, ignorar las estructuras artificiales utilizadas para eludir impuestos y gravar la sustancia económica real. No obstante, esta cláusula ha quedado de momento fuera de la reforma porque no hay consenso en el Ecofin.

Respaldo a las recomendaciones de Bruselas para España

Además, el Ecofin ha respaldado sin cambios las recomendaciones presentadas el pasado 2 de junio por la Comisión Europea para España, entre las que se incluyen introducir modificaciones para ampliar la base del IVA -pasando productos desde los tipos reducidos al general-, ampliar los tributos medioambientales (igualando el gravamen aplicado al diésel con el de la gasolina) y subir el impuesto sobre bienes inmuebles.

También se recomienda rebajar las cotizaciones sociales y eliminar las deducciones en el impuesto de sociedades y el IRPF.

Este apoyo de los Veintiocho se produce el mismo día que el Gobierno español va a presentar una batería de cambios fiscales que busca rebajar la carga impositiva sobre las rentas medias y bajas, y las pymes. Unas modificaciones fiscales que no atienden algunas de esas peticiones, como las variaciones en el IVA.

Se cierra el expediente de déficit excesivo a seis países

Los Veintiocho han apoyado las recomendaciones macroeconómicas del resto de miembros y la recomendación de la Comisión Europea de cerrar los expedientes abiertos por déficit excesivo a Austria, Bélgica, Dinamarca, Holanda, Eslovaquia y República Checa.

La decisión se ha tomado después de comprobar que esos seis países han tomado medidas para situar el desvío de manera estable por debajo del 3%.

El vicepresidente de la Comisión Europea y responsable de Asuntos Monetarios y Económicos, Olli Rehn, explicó el jueves tras el Eurogrupo que el número de países con un expediente por déficit excesivo abierto se ha reducido de los 24 que había en la primavera de 2011 a los 11 actuales. Entre ellos se encuentra España, que debe seguir aplicando ajustes para situar su desvío presupuestario por debajo del 5,8% este año y del 4,2% en próximo, para lograr llegar por debajo del límite del 3% en 2016.