Yarmuk, el talón de Aquiles del régimen sirio en Damasco
- El Estado Islámico sorprende con un ataque a 5 km del centro de la capital
- Las tensiones entre tres grupos islamistas parecen estar detrás de esta acción
- Las divisiones entre los palestinos también afloran en el campo de refugiados
- Las autoridades palestinas reafirman su apoyo al régimen de Al Asad
Desde hace una semana, el grupo Estado Islámico (EI) ataca el campo de refugiados palestinos de Al Yarmuk, a tan solo cinco kilómetros del centro de Damasco y punto débil del régimen sirio en la capital.
Hasta ahora no se había documentado la presencia de miembros del EI en el interior de la ciudad, pero sí en su periferia, donde uno uno de sus feudos es el distrito de Al Hayar al Asuad, vecino a Al Yarmuk y por donde entraron al campo el miércoles pasado.
En su interior, los yihadistas se han encontrado con una área habitada por unas 18.000 personas --frente a las 160.000 que había antes del inicio del conflicto sirio hace cuatro años-- donde es complicado que el Ejército lance una contraofensiva si no quiere causar una masacre de civiles.
"Aunque está en la capital, Al Yarmuk no había sido hasta ahora una prioridad para el régimen, que se había limitado a cercarlo. Es una zona muy poblada y son palestinos, no sirios", ha destacado el analista militar Hisham Yaber.
Debido al gran número de civiles que quedan dentro, el EI ha adoptado una estrategia de "guerra de guerrillas" en sus calles. "Es una situación muy complicada para el Ejército porque lo primero que se aprende en la academia militar es que es muy difícil luchar en zonas habitadas a no ser que las destruyas", ha explicado.
De hecho, hasta ahora, las autoridades no han intervenido en el interior del campo y se han limitado a bombardear y lanzar proyectiles de artillería contra determinados distritos.
Palestinos rebeldes y progubernamentales
Antes del comienzo de la contienda, hace ya más de cuatro años, este campo de refugiados informal, establecido en 1957 y con una superficie de 2,1 kilómetros cuadrados, acogía la mayor comunidad de refugiados palestinos en Siria.
En diciembre de 2012, los insurgentes de la oposición al régimen de Bachar Al Asad asumieron su control y, desde entonces, sus calles han sido escenario de enfrentamientos entre grupos opositores y fuerzas gubernamentales, apoyadas por el Frente Popular para la Liberación de Palestina-Comando General (FPLP-CG).
Desde julio de 2013, las fuerzas armadas sirias lo mantenían cercado.
En opinión del analista del centro de estudios Carnegie de Oriente Medio en Beirut Mario Abu Zeid, el EI se ha beneficiado en cierta medida del avance del Frente al Nusra, filial de Al Qaeda en Siria, en el resto del país.
"El progreso del Frente al Nusra ha hecho que el régimen se concentrara en él y redujera su presión sobre las líneas de abastecimiento del EI, que ha aprovechado la oportunidad para lanzar un ataque sorpresa en Damasco a través de Al Yarmuk", ha considerado el experto.
Abu Zeid ha dicho que ha habido "una especie de acuerdo" entre el EI y la rama siria de Al Qaeda, pese a que ambas organizaciones son rivales en otras partes de Siria: "No han cooperado directamente porque cada cual tiene su propia agenda, pero el Frente al Nusra se está manteniendo al margen", ha reflexionado.
Antes de la irrupción del EI en Al Yarmuk, los grupos que estaban presentes en su interior eran Aknaf Beit al Maqdis --una facción palestina opuesta al régimen sirio-- y la filial de Al Qaeda, a la que activistas y fuentes palestinas acusan de haber ayudado a los yihadistas a infiltrarse en el campo.
Ejército del Islam: tercer actor islamista
Abu Zeid opina que el Frente al Nusra quería desembarazarse de algunos líderes de organizaciones rebeldes que no querían colaborar con él, como el Ejército del Islam, presente en Guta Oriental, en la periferia de la capital y que ha acudido a defender Al Yarmuk; por lo que ha dejado que el EI se introduzca en el campo.
Para el portavoz del FPLP-CG, Anuar Raja, el EI no solo ha atacado el campo para poner un pie en Damasco, sino también para perjudicar a los palestinos. "Detrás del EI está Israel, que lo que desea es atacar a los palestinos para que se dispersen y negarles su derecho de retorno a Palestina", ha lamentado a Efe este responsable.
Resulta complicado vislumbrar un desenlace al conflicto en Al Yarmuk, donde Yaber augura una larga ofensiva que posiblemente acabe con un alto el fuego entre las partes por la situación humanitaria. "Dudo mucho que ninguna parte tome el control total", ha subrayado.
El régimen seguirá bombardeando
Mientras, este miércoles se han reunido en Damasco el ministro sirio de Reconciliación Nacional, Ali Haidar, y el miembro del comité ejecutivo de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP) Ahmed Machdalani.
El ministro ha recordado que ni el Gobierno ni el liderazgo palestino administran el campo de refugiados y ha acusado a "ciertas partes de intentar cambiar la situación geopolítica para convertir Damasco en el punto débil". Y ha dicho que la actuación de "las organizaciones terroristas" no le deja al Ejecutivo otra alternativa que la militar.
Por su parte, Machdalani ha dicho que los palestinos no desean que Al Yarmuk se convierta en "un campo de batalla para grupos terroristas" y ha respaldado al régimen de Al Asad. "Los líderes palestinos y la OLP apoyarán cualquier decisión adoptada por el Gobierno sirio respecto al campo de Al Yarmuk", ha subrayado Machdalani, quien ha calificado de "muy poco probable" una salida negociada.
Mientras, los civiles siguen tratando de escapar de los combates, que se han extendido de nuevo por el campo. La Agencia de la ONU para los Refugiados Palestinos (UNRWA) ha informado de que 94 ciudadanos han conseguido abandonarlo este miércoles.
Desde el interior del lugar, el activista Mohamed Ahmed, del Centro de los Mártires de Al Yarmuk, ha dicho por internet que dentro del propio campo hay un desplazamiento continuo de personas que se trasladan de zonas más peligrosas a otras más seguras.
En esta jornada tampoco ha podido entrar ayuda humanitaria a Al Yarmuk.