Miles de manifestantes protestan en toda Francia contra la reforma laboral
- Las movilizaciones siguen está semana con huelga de trenes el miércoles
- Renfe alerta de que sus servicios internacionales se verán afectados
- El presidente francés sostiene que la ley se va a aprobar: "No voy a ceder"
Miles de manifestantes han recorrido las calles de las principales ciudades francesas, en una jornada de movilizaciones contra la reforma laboral del Gobierno del primer ministro Manuel Valls que se ha saldado con 87 detenidos en todo el país. El presidente francés, François Hollande, ha anunciado que mantendrá la ley: "No voy a ceder". En frente, el número uno de la Confederación General del Trabajo (CGT), Philippe Martinez, que ha señalado que "cuando a alguien no se le escucha, hay que alzar la voz para hacerse oír".
Las autoridades aseguran que 68.000 personas se manifestaron en las calles de decenas de ciudades del país, frente a las 200.000 que calculan los convocantes, que consideran que debilita la posición negociadora de los trabajadores.
La reforma laboral pretende flexibilizar las reglas laborales para luchar contra el desempleo que afecta a más del 10% de la población francesa, pero sus detractores opinan que el proyecto de ley es demasiado favorable para las empresas y podría empeorar la precariedad de los asalariados.
Las protestas terminaron con enfrentamientos entre grupos violentos y las fuerzas del orden en varias ciudades. En especial, los disturbios se desarrollaron en París al término de una manifestación que, según los convocantes, reunió a unas 55.000 personas (11.000 según la policía), y en Nantes, donde las fuerzas del orden han utilizado chorros de agua para dispersar a los activistas que lanzaban proyéctiles sobre la prefactura.
En la capital, la manifestación comenzó con calma, pero en su tramo final un grupo de encapuchados comenzó a lanzar objetos contra los agentes del orden, que respondieron con gases lacrimógenos, lo que dio lugar a escenas de violencia similares a las de pasadas jornadas de protesta. Según las autoridades, doce personas fueron detenidas, nueve de ellas por portar armas y otras tres por lanzar proyectiles.
Cuatro sindicatos y tres organizaciones de estudiantes convocaron esta nueva serie de protestas, que va a tener continuidad a lo largo de la semana hasta el jueves, con paros convocados en los trenes y en el control aéreo. De hecho, este miércoles se anularán un tercio de los trenes de alta velocidad TGV, un cuarto de los cercanías, el 40% de los interregionales, un 60% de los interurbanos y la mitad de los regionales. Para el jueves, se han cancelado el 15% de los vuelos previstos desde el aeropuerto parisiense de Orly y la huelga puede causar retrasos.
Bloqueo de los camioneros
Desde primera hora, los camioneros franceses ralentizaban la circulación y bloqueaban puertos, refinerías y otros centros industriales por todo el país. Los transportistas se quejan de que la reforma laboral disminuirá la retribución de sus horas extraordinarias.
Esta mañana, a las 08.00 horas, el Centro Nacional de Información Vial (CNIR) constataba diversas operaciones 'caracol' de camiones que ralentizan la circulación en puntos estratégicos de la red como en Vitrolles (cerca de Marsella), Rennes, Caen, Nantes o Saint Omer (cerca del puerto de Calais).
Algunos accesos al puerto de Saint Nazaire (oeste) estaban bloqueados, como también las entradas a la refinería de Donges que está allí.
En Le Havre (noroeste), al cierre de muchas carreteras por los camioneros se sumaba la movilización de estibadores del puerto.
En Burdeos, desde la madrugada hubo diferentes acciones sucesivas en el mercado mayorista de Cestas o en el complejo petrolero de Perguilhen.
La huelga de la SNCF afecta a Renfe
Renfe ha advertido de que la huelga de la compañía francesa SNCF convocada para este miércoles afectará a sus servicios internacionales de conexión entre España y Francia. Según ha informado la empresa española, el servicio Barcelona-Toulouse finalizará este martes su recorrido en Perpiñán a causa de este paro laboral, que empieza a las 19:00 horas.
Asimismo, el miércoles no circularán los servicios Barcelona-Toulouse y Barcelona-Lyon, ni viceversa, mientras que el jueves, además de estos servicios, tampoco circulará el Madrid-Marsella.
Para el viernes, Renfe ha ofrecido alternativas a los viajeros del tren Toulouse-Barcelona con origen en Toulouse y Carcassone, que podrán ir hasta Narbonne en tren regional o seguir su desplazamiento hasta Barcelona en el tren Marsella-Barcelona-Madrid.
Por otro lado, Renfe no ha podido garantizar que los trenes de la línea R3 puedan llegar a la Tour de Carol ni que los de la R11 lo hagan hasta la localidad de Cerbere. La compañía ha señalado que es "completamente ajena" a esta circunstancia y lamenta las molestias que esta huelga pueda provocar en sus clientes.
Hollande defiende la reforma laboral
El presidente francés, François Hollande, ha afirmado en una entrevista televisada que "no va a ceder" y que la ley de reforma laboral se aprobará porque ya "ha habido un compromiso" con "los sindicatos reformistas" y que cuenta con el respaldo de "la mayoría de los diputados socialistas". "Ha habido demasiados gobiernos que han cedido", ha añadido Hollande.
"Prefiero que me vean como un presidente que hace reformas aunque sean impopulares, que un presidente que no hace nada. Y me podrán decir ustedes, en España e Italia están mejor en empleo. Pero es que la situación ahí era mucho peor, el crecimiento se había hundido y ahora tienen un reprise algo más fuerte que nosotros", ha dicho Hollande en una entrevista a la emisora Europe 1, donde ha reconocido que "con una ley no hay que creerse que se crea empleo", pero "se va a dar visibilidad" a las empresas.
El Gobierno galo aprobó con un atajo constitucional (el artículo 49.3) su proyecto de ley de reforma laboral, que no fue sometido a la votación de la Asamblea Nacional, donde varios diputados socialistas son contrarios a esa ley, lo que dificultaba recabar todos los apoyos suficientes. Para evitar que se aprobara, la oposición presentó una moción de censura contra el Ejecutivo, que fracasó.
El proyecto de ley pasa ahora al Senado, donde se debatirá entre el 13 y el 24 de junio y se votará el día 28 de ese mes. De introducirse cambios, volvería a la Asamblea Nacional, donde el Ejecutivo podría recurrir de nuevo a la Constitución para evitar que sea votada.