Siete entrevistas con Mario Benedetti en Radio Nacional
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El ojo crítico despidió al poeta con voces amigas en un programa especial
El poeta Mario Benedetti confesaba ante los micrófonos de Radio Nacional que le “resulta muy difícil” imaginarse una vida sin escribir. “Porque yo escribo desde la infancia. Ha sido siempre no sé si mi virtud o mi vicio, pero ha sido un poco mi estilo de vida”. Así se lo contaba a Fran Sevilla, periodista de RNE y entonces corresponsal en América Latina, el 21 de noviembre de 2006.
La poesía es el género con el que más libros escribió y en el que se siente “más cómodo [...] aunque también tengo cuentos, novela, teatro”, le explicaba al también poeta Javier Lostalé en ‘El ojo crítico’ el 7 de junio de 2005. A pesar de la enfermedad de su mujer, alzheimer, seguía escribiendo: “Es un poco el escape que tengo porque con todos los problemas que tengo, por lo menos la cabeza me sigue funcionando”.
Cuando se cumplen 13 años de su muerte, falleció el 17 de mayo de 2009 en Uruguay, en Radio Nacional recuperamos su palabra a través de siete conversaciones que mantuvo entre 1980 y el 2006 en diferentes programas.
Los amigos, en la radio y la juventud
“Yo no creo que tenga 1 millón de amigos. Creo que nadie en el mundo puede tener un millón de amigos. Puede tenerlos a lo mejor de lectores. No sé, no estoy seguro, pero amigos creo que se tienen dos, tres o cuatro en toda la vida”, así de contundente empezaba la entrevista con el escritor en Protagonistas el 24 de marzo de 1980 con Luis del Olmo.
En esta conversación también se refirió a su profesión como locutor de la Radio Francesa “durante un tiempo breve”: “Un trabajo que me agradaba bastante”. “Primero traducía al español, los seleccionaba y yo mismo los leía en español para América Latina”.
Señaló que la melancolía es “un signo de debilidad” y “hay que sobrevivir a la melancolía generando razones de vida y no dejándose apabullar por las razones de muerte”. En otro punto de la entrevista explicaba que “no soy de los que añoro mucho mi juventud ni mi infancia. No fueron muy estimulantes para mí. Creo que empecé a ser joven cuando ya tenía unos cuantos años, pero en cambio miro a los jóvenes de hoy y eso sí me estimula bastante. Los veo mucho más libres, más independientes, mucho mejor de lo que yo era cuando era joven”.
Una poesía entendible
Mario Benedetti se reconocía como un poeta popular en una entrevista en No es un día cualquiera con Pepa Fernández y a lo que añadía: “No son muchos los poetas que son populares. Para mí es un cierto misterio. Sobre todo que mi poesía llega tanto a los jóvenes, lo cual me estimula mucho”.
Explicaba que cuando él empezó “a leer y a tratar de escribir”, los poetas del río la Plata que había eran “misteriosos, enigmáticos, difíciles de llegar a lo que querían decir. Yo decía ‘yo así no voy a escribir. Hasta que en un periódico en el que estuve trabajando en Buenos Aires me encontré con un libro de un poeta argentino, Baldomero Fernández Moreno, y me puse a leerlo. Encontré que era un poeta claro, sencillo y muy buen poeta. A partir de ese momento y con esa influencia, empecé a escribir una poesía un poco como la que he seguido escribiendo después”.
La poesía y la música
‘El sur también existe’, el disco de Joan Manuel Serrat con poemas de Mario Benedetti, se le “ocurrió” al cantautor catalán, así lo explicaba el poeta en una entrevista el 23 de junio de 1988 en el programa ‘Clave de sol’. “No nos conocíamos personalmente [...] y trabajamos duramente durante un año”.
Sobre las diferencias entre un poema y una canción y cómo él lo afronta explicaba: “Casi siempre escribo un verso libre y sin rima, los cantantes precisan la rima [...]. A Serrat, por ejemplo, le interesan algunos temas que yo trataba en poemas, pero me dice ‘conviértemelo en una letra de canción’ [...]. Me fue mucho más fácil hacer directamente una letra de canción como es "El sur también existe" que transformar un poema en una letra de canción, como por ejemplo "Una mujer desnuda y en lo oscuro" que era un poema y se transformó en otra canción que es bastante más larga que el poema”.
La preocupación por la globalización
“Una camino que va hacia el suicidio de la humanidad”, así definía Mario Benedetti hacía dónde iba el mundo en una visita del programa ‘La estación azul’ a principios de octubre de 2002. “Eso es lo que a mí me preocupa, mucho más que mi propia muerte. Yo tengo la esperanza de que la humanidad, como en otros momentos de la historia donde ha estado en el fondo de un abismo, se ha tirado de los pelos hacia arriba y se ha sacado de ese abismo. Pero está el problema de la globalización y de toda la fuerza que tiene esa gran potencia que ahora lo domina todo”.
Una cultura que une
“Yo creo que sí se puede hablar de una cultura latinoamericana” porque “la mayor parte de los países de América Latina tenemos una lengua común: el español. Es cierto que además hay otras raíces culturales y está también incluso las lenguas indígenas, una tradición indígena que también forman parte de lo latinoamericano y que provocan especificidades en determinados países. Pero los matices que hay dentro de la cultura hispánica de América Latina, no son demasiado distintos de los que puede haber entre las distintas regiones de España [...]. Aunque a veces los matices, las épocas, las distintas vivencias, los periodos históricos... hagan que se diferencie mucho una producción cultural, por ejemplo de algún país del cono sur con la de México o la de Cuba”, señalaba en el programa el 'Tímpano' de Radio Nacional en 1982.
A la espera de un año de vida
Radio Nacional se despedía el año 2006 con una programación especial. En la tarde de aquel 31 de diciembre se pudo escuchar al poeta conversando con Mamen Asencio. Explicaba que este había sido un año “tremendo” y “bastante dramático”: “Murió mi mujer después de 60 años de matrimonio, murió mi cuñada, la mujer de mi hermano. Murió la madre de Viglietti [la pianista Lyda Indart], que no solo hemos hecho cosas juntos sino que es un gran amigo. Murió la madre de mi abogada. Así que ha sido un año de muerte. Estoy deseando que se acabe para ver si empieza un año de vida”.
Para volver a empezar y refugiarse explicaba que para él “siempre ha sido escribir”. “Yo escribo desde niño, así que prácticamente nunca he dejado de escribir. Cuando me han pasado estas cosas dramáticas, estas cosas tan dolorosas, mi refugio también ha sido escribir”. Este fue la última conversación de Benedetti con RNE. Falleció en Montevideo, Uruguay, el 17 de mayo de 2009.