Enlaces accesibilidad
arriba Ir arriba

Erradicar la pobreza ha sido el principal objetivo de China desde que hace cuatro décadas empezó su industrialización. Este 2020 era el límite para alcanzar la meta. Según fuentes oficiales, lo más complejo eran los pueblos remotos e inaccesibles en varias provincias, pero según estas mismas fuentes lo habría conseguido, y todos ya vivirían por encima del umbral de la pobreza.

En principio los ingresos anuales de una familia no deben ser inferiores a los 450 euros, un estándar de unos 100 euros menos del que fija el Banco Mundial. Pero a eso se debe sumar "que puedan comer, vestirse y que tengan garantizada una vivienda, educación y un seguro médico", explica Lei Ming, catedrático en Desarrollo en este país, el más poblado del mundo, y en el que otros expertos destacan también que, aunque se ha eliminado la pobreza extrema en estos sitios remotos, todavía hay muchas desigualdades sociales y un gran desequilibrio entre las ciudades y el ámbito rural.

Pedro Morilla, director técnico del cub de fútbol Wuhan, tres ciudades, asegura en Las mañanas de RNE con Íñigo Alfonso que llevan una vida normal dentro de la precaución. "El control sigue siendo máximo aunque en lo que afecta al ocio la situación es normal". No obstante reconoce que los controles siguen siendo máximos especialmente con los que vienen de fuera. En definitiva vida normal pero con muchísimo control con pruebas PCR continuas. Pone el acento en las medidas estrictas de control fronterizo. Hay cámaras por toda la ciudad y la población está controlada, dice. Reconoce eso sí que son medidas caras que no todos los países pueden asumir.

Los habitantes de Wuhan tienen la confianza de que su ciudad es ahora mismo la más segura del mundo. Volvemos a China un año después de inicio de la pandemia de la mano de nuestra corresponsalMavi Doñate. “No creo que vuelva a pasar. El Gobierno está ahora más preparado y nosotros nos protegemos bien”, dice un vecino. En Wuhan se ven restaurantes están llenos, sin límites de horarios y paseantes sin mascarillas.

Un año después del inicio de la pandemia se sabe de forma extraoficial que la población de riesgo está vacunada, que se sigue haciendo PCR de forma aleatoria y que algunas familias con víctimas mortales exigen a las autoridades parte de una verdad que según su opinión todavía no se ha contado.

Los corresponsales en China de TVE y la agencia EFE, entre otros medios, felicitan la Navidad desde Pekín. Unas fiestas diferentes en las que no podrán volver a España porque China impone cuarentenas para controlar el coronavirus. Lanzan un mensaje de esperanza y recuerdan que "por el presente no se puede perder el futuro".

FOTO: Una mujer vende luces de Navidad en la ciudad china de Yiwu, Alex Plavevski/EFE

El presidente de la sección española de Reporteros Sin Fronteras, Alfonso Armada, defiende que "la libertad de prensa es la mejor vacuna contra la desinformación" y que 2020 deja 387 periodistas encarcelados en todo el mundo por ejercer su labor informativa. En una entrevista en TVE, Armada alerta de que "China es la principal cárcel de periodistas" con 117 reporteros encarcelados por publicar noticias que no le han gustado al Gobierno sobre todo en lo referente a la pandemia de coronavirus. El periodista sostiene que frente a la inmediatez de las pantallas hay que apostar por las crónicas y "acercarse a los hechos con los cinco sentidos", apunta que hay "demasiado ruido en la red" y recuerda la importancia de ser "impecables con los códigos deontológicos".

FOTO: Cati Cladera/EFE

La corresponsal de TVE en Pekín, Mavi Doñate, habla con una de las personas que se ha vacunado contra la COVID-19 en China. Según asegura la empresa en la que trabajaba les daba la oportunidad de hacerlo. Sin embargo, se desconoce el número de personas que se han vacunado ya contra el virus con los fármacos producidos en China. Las personas que se han vacunado tienen un certificado que les da inmunidad por un año.

¿Cuánto mide el Everest? Después de años discutiendo cuánto, Nepal y China han acordado que la cima más alta del mundo alcanza los 8.848,86 metros, 86 centímetros más de lo que se pensaba hasta ahora. El desacuerdo residía en que Nepal quería incluir el espesor de la nieve y Pekín no. Informa Rebeca Cuenca.

Según la cadena estadounidense CNN, China cometió graves errores de gestión al principio de la pandemia que se tradujeron en una información poco realista de los efectos de la COVID-19. La cadena ha accedido a documentos confidenciales del Centro de Prevención de Enfermedades de Hubei, la provincia donde se dieron los primeros casos. Entre los fallos, tardar hasta 23 días en hacer diagnósticos y usar pruebas que dieron falsos negativos hasta el 10 de enero. Muchos kits no eran válidos.

El 10 de febrero el presidente chino visitó un hospital de Pekín. Ese día oficialmente había unos 2.500 casos de COVID-19. Sin embargo, los documentos filtrados hablan de casi 6.000. China no había incluido hasta entonces a sospechosos o diagnosticados a partir de los síntomas.

[Coronavirus: última hora, en directo]

Un año después del brote de COVID-19 en Wuhan, sigue sin saberse cual fue el origen del virus. La Organización Mundial de la Salud anunció una investigación, pero de momento, solo científicos chinos tienen permiso para estudiar qué pasó en el mercado de la ciudad china donde se registró el primer contagio masivo. Según la versión oficial de las autoridades chinas, el 1 de diciembre de 2019 hubo ya una persona con síntomas compatibles con la enfermedad, pero se desconoce si ese primer paciente fue el origen. [Coronavirus: última hora en directo

Corea del Sur y Japón han endurecido en los últimos días las restricciones en sus territorios ante una posible tercera ola de COVID-19. Los contagios han aumentado exponencialmente en ambos países con respecto a junio y temen que las instalaciones sanitarias se saturen. En Hong Kong, también se han cerrado karaokes, bares y salas de baile tras detectarse 92 nuevos positivos. Por su parte, China continental ha comunicado este sábado únicamente seis contagios, todos importados. Coronavirus: última hora.

Un grupo de diputados taiwaneses ha arrojado vísceras de cerdos a los miembros del Gobierno en la sesión parlamentaria de este viernes, que ha acabado en una batalla entre los defensores y detractores de la entrada de productos porcinos y de reses de Estados Unidos a partir del 1 de enero.

En China una de cada cuatro mujeres sufre, en silencio en la mayor parte de los casos en silencio, violencia de género. La falta de denuncias tiene su origen en unas tradiciones muy arraigadas en todo el país, que consideran que la mujer debe permanecer en el matrimonio y que la violencia de género es algo privado.

El asesinato a manos de su exmarido de una famosa bloguera, Lamu, ha sacudido la conciencia de parte del país y ya hay voces que piden que se modifique la ley contra el maltrato. Dicha ley, por ejemplo, no reconoce como maltrato la violencia ejercida cuando los conyuges ya no viven bajo el mismo techo.

Es el último vídeo que Chang Chan colgó en Youtube el pasado mes de mayo, dos días antes de que la detuviesen. En él cuestionaba la legalidad de los rastreadores de Inteligencia artificial obligatorios. Chang es lo que en China se define como una reportera ciudadana, es decir alguien que no se dedica profesionalmente al periodismo, pero que informa de determinados hechos. Y así lo hizo en Wuhan en febrero cuando allí se vivían los efectos más duros de la Covid, y China censuraba las imágenes de hospitales colapsados, o estaba prohibido grabar sitios como el Instituto de Virología donde experimentan con coronavirus. Pero sus videos son para el Gobierno chino una forma de buscar pelea y crear problemas, unos cargos que suelen imputar a los disidentes. Y delitos que se traducen en un castigo de cinco años de cárcel, es lo que que ha pedido el fiscal para ella, en la vista que se se ha celebrado ahora después de que haya estado seis meses en prisión preventiva en Shanghai. Su abogado denuncia en este escrito que le han limitado las visitas a su defendida, a la que la que se le acusa también de difundir información falsa. Además de Chang Chan, otros tres periodistas ciudadanos que reportaban los momentos más dramaticos de Wuhan fueron detenidos. Uno de ellos es el ex-empresario, Fang Bin, que fue arrestado en enero y a día de hoy no se le ha vuelto ver, ni se sabe de su paradero.