Dos petroleros rusos han sufrido sendos accidentes en el estrecho de Kerch, que conecta el mar Negro con el de Azov. Uno se ha partido por la mitad y el otro ha sufrido graves daños. Ambos transportaban miles de toneladas de combustible y otros derivados. Greenpeace ha dicho que puede ser una de las mayores catástrofes medioambientales en la historia del mar Negro. Los dos buques tenían más de medio siglo de antigüedad y, pese a haber sido reformados en los 90, no eran aptos para navegar en condiciones tan adversas. Desde las sanciones por la invasión de Ucrania, Moscú ha popularizado el uso de decrépitos petroleros registrados en otros países para transportar sus combustibles, vetados en Occidente.
Foto: EFE/CANAL DE TELEGRAM DE LA FISCALÍA DE TRANSPORTE DEL SUR DE RUSIA