Las campanas han sonado este jueves a las 08:15 (01:15 hora española peninsular) en el Parque de la Paz de Hiroshima, exactamente 70 años después del lanzamiento por un bombardero estadounidense de la bomba atómica, el primer ataque nuclear de la historia.
La conmemoración ha arrancado con un minuto de silencio en una ceremonia a la que han asistido representantes de un centenar de países, una cifra récord.
La ceremonia de Estado y el tributo a las víctimas y los supervivientes, conocidos en Japón como hibakusha, se ha celebrado en medio de las continuas protestas contra el gobierno nipón por impulsar la reforma militar y la inminente reactivación de centrales nucleares tras el desastre de Fukushima.
El bombardeo de Hiroshima, junto al de Nagasaki, precipitó la rendición de Japón, anunciada por el emperador Hirohito en una alocución radiofónica, y el final de la segunda Guerra Mundial.