La Fiscalía tailandesa acusa a Daniel Sancho de tres delitos: asesinato premeditado, destrucción de documentación ajena y ocultación del cuerpo.
Son los cargos a los que se enfrenta a partir de mañana en esta corte provincial. Su Defensa asegura que podrá demostrar que no hubo intenicón de matar aunque sí reconoce que hubo una pelea entre ambos y que se defendió. Y pone en duda el informe policial entregado a la fiscalía.
El pasado miércoles, los Mossos d'Esquadra detenían en Girona a un hombre buscado por presuntamente apuñalar y matar a su hijo de cinco años y herir gravemente a su madre. La principal hipótesis del crimen es que se trata de un nuevo de caso de violencia vicaria. De ser así, estaríamos ante el quinto caso en los que llevamos de año. En las Mañanas de RNE hemos hablado con Fanny Sánchez Juan, psicóloga clínica y miembro de la Junta Directiva de la Asociación de Psicología y Psicoterapia Feminista: “La sensación de las mujeres es de absoluta sensación de indefensión y de impotencia, la solución sensata y lógica sería la separación y el alejamiento del padre, pero vivimos en un sistema patriarcal que aún prioriza los derechos de los progenitores por encima de los derechos de las mujeres y de los hijos y las hijas. Por tanto, el miedo es permanente”.
Fanny Sánchez explica que cuando hablamos de violencia vicaria no solo hablamos del asesinato, que es la parte más visible, "la punta de un iceberg", detrás “hay una cantidad ingente de conductas que no son fáciles de visibilizar”. La experta recuerda que este tipo de violencia también engloba “la coacción, el chantaje, la manipulación, el hablar continuamente mal de la madre para desautorizarla y descalificarla” y añade que muchas veces los hijos e hijas se convierten en “meros instrumentos”.
La experta nos cuenta que el primer paso que realiza en consulta es “validar a las víctimas, decirles que entiendo perfectamente lo que están sintiendo, lo que están pasando, que sé que lo que cuentan es la verdad” y añade que también hay que crear “un plan de salud” para estas mujeres, que pasa por el reconocimiento de su situación, “más allá del plan de justicia que desgraciadamente falla”.
En dos días, se han cometido en España cuatro asesinatos que se investigan como violencia de género: de dos niñas en Almería, muertas presuntamente en manos de su padre con el objetivo de dañar a la madre, y de otras dos mujeres. La última fue asesinada por su expareja este martes en A Coruña. Se llamaba Andrea, tenía 25 años y un hijo de a penas dos. El año pasado, las víctimas de violencia machista aumentaron un 10%.
Las pequeñas Larisa y Elisa, de 2 y 4 años, murieron envenenadas, asesinadas presuntamente por su padre. La autopsia ha confirmado que el hombre usó un pesticida para acabar con la vida de sus hijas y se suicidó horas después.
Este martes las han recordado con velas y flores en el colegio al que iba la mayor de las hermanas. La madre estaba considerada como una víctima de extrema vulnerabilidad: es muy joven, migrante y sin recursos económicos. El juicio a su expareja por maltratarla y amenazarla estaba fijado para abril. Los expertos abren una reflexión sobre como deben valorarse casos tan vulnerables.
El exdelegado Gobierno para la Violencia de Género Miguel Lorente ha asegurado que con casos como el asesinato de dos hermanas de corta edad en Alboloduy (Málaga) presuntamente a manos de su padre, un caso en el que había una orden de alejamiento, "estamos fallando como sociedad".
En una entrevista en La Hora de La 1, Lorente ha defendido que "hay que tener una visión global sobre la violencia de género, para evitar esos acuerdos - en alusión a que los padres acordaron no entregar a las niñas en un punto de encuentro- que pueden estar condicionados por presión o amenazas".
En este punto, Lorente ha incidido en que el cambio en el que se suprimió el punto de encuentro, es el que ha podido generar un "riesgo", algo que cree que se debería haber valorado adecuadamente.
A su juicio, hace falta "formación" y "comprensión del caso particular". Asimismo sostiene que no basta con dar una "respuesta policial" a la violencia de género, sino que hay que dar también una respuesta "social" y "sanitaria".
Según Lorente, un 20% de los asesinatos de niños es por violencia vicaria y en un 28% de los casos había una denuncia previa.
En una pequeña localidad de Almería, un hombre ha matado a sus dos hijas de dos y cuatro años envenenándolas durante una visita de fin de semana. El hombre, que después se ha suicidado, tenía vigente una orden de alejamiento sobre la madre, pero se habían autorizado seis horas de convivencia los sábados y domingos. De confirmarse la hipótesis de la Guardia Civil, estaríamos ante un nuevo caso de violencia vicaria. Julia Clavero, abogada experta en Derecho de Familia y Penal, ha explicado en 24 horas de RNE que, aunque cada vez se usa más el término 'violencia vicaria', no se recoge como tal en el Código Penal: "Sí se podría considerar como una parte de un maltrato psicológico continuado (…) Son muy habituales esos casos en los que precisamente el agresor utiliza a los menores como arma arrojadiza para continuar esa violencia de la que la víctima quiere escapar".
En las últimas estadísticas del Instituto Nacional de 2022, solo en el 12,9% de los casos en los que se ha acordado una medida cautelar se ha suspendido el régimen de visitas. En este caso, el hombre estaba pendiente de un juicio, pero se le habían autorizado seis horas de convivencia con las niñas. Ante esta incongruencia, Julia Clavero ha apuntado el tiempo que tardan los juzgados en resolver los casos: "En nuestros juzgados españoles, en algunas localidades, tardamos dos años en tener informes psicológicos. ¿Cómo se va a tomar la decisión con los medios que se tienen en esos momentos, en esa medida cautelar que se acuerda dentro de las 72 horas después de poner cualquier denuncia?"
El municipio de Pizarra, en Málaga, ha amanecido consternado por el asesinato de Gracia, de 49 años. Su expareja la mató el sábado por la noche, en plena calle y delante de su hija menor de edad. Después se suicidó. La Guardia Civil investiga ahora dónde consiguió los dos fusiles de asalto con los que cometió el crimen.
La Guardia Civil investiga el presunto asesinato de dos niñas de dos y cuatro años de edad a manos de su padre, en un posible caso de violencia vicaria, en una pedanía del municipio de Alboloduy, Almería. Los hechos habrían ocurrido en la noche del domingo.
La Guardia Civil investiga el presunto asesinato de dos niñas de dos y cuatro años de edad a manos de su padre, en un posible caso de violencia vicaria, en una pedanía del municipio de Alboloduy, Almería. Los hechos habrían ocurrido en la noche del domingo.
Los funcionarios de prisiones mantienen este sábado el bloqueo en las cárceles de Quatre Camins, Joves y Wad Ras en Barcelona. Al menos 1.000 internos se verían por estos bloqueos que van a continuar "con más intensidad, más fuerza y hasta que el cuerpo aguante", asegura en el informativo '24 Horas' el portavoz del sindicato de prisiones de UGT en Cataluña, Xavier Martínez. Mantienen que no se sentarán a negociar sin la dimisión de la consellera de Justicia, Gemma Ubasart. "Exigimos el cese fulminante de la figura que ha provocado que, durante los últimos años, se deteriore la institución", exige Martínez. El portavoz de UGT adelanta en Radio Nacional que tienen intención de volver a cerrar todos los centros de Cataluña este lunes. "Las medidas que pedimos son reorganizar convenientemente la institución penitenciaria y pasa por hacer una limpieza de personas de estructura", expresa.