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El alcalde y el regidor de urbanismo de Santa Coloma de Gramanet han salido del Ayuntamiento entre gritos e insultos. Un total de ocho personas han sido detenidas en el marco de la 'operación Pretoria' contra la corrupción urbanística en esta localidad catalana (27/10/09).

Una nueva operación contra la corrupción ha dejado nueve detenidos en Cataluña. Entre estos se encuentran el alcade de Santa Coloma de Gramenet, Bartomeu Muñoz, del Partido Socialista y de los ex altos cargos del Gobierno de CIU Lluis Prenafeta y Maci Alavedra. La operación anticorrupción, ordenada por el juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón, se está llevando de una forma discreta y continúa abierta por lo que no se descartan más detenciones.

Hay ocho detenidos, entre ellos, el alcalde de Santa Coloma de Gramanet, del Partido Socialista, y dos estrechos colaboradores de Jordi Pujol en los tiempos en que era presidente de la Generalitat.

Golpe contra la corrupción en tres ayuntamientos de Cataluña. La Guardia civil ha detenido al alcalde socialista de Santa Coloma de Gramenet y dos altos cargos en los gobiernos de Jordi Pujol: Maciá Allavedra y Lluis Prenafeta. En la operación dirigida por el juez Garzón hay, al menos, ocho detenidos acusados de los presuntos delitos de tráfico de influencias, blanqueo de capitales y cohecho. Los último datos de la operación se los hemos contado en '14 horas' donde también hemos recogido las primera reacciones de los partidos (27/10/09)

La Guardia Civil ha detenido al menos a sietete personas en el marco de una operación contra la corrupción desarrollada en la provincia de Barcelona.

Entre los arrestados se encuentran el alcalde de Santa Coloma de Gramenet (Barcelona), Bartomeu Muñoz, del PSC, el director gerente de Servicios del consistorio, Pascual Vela y empresarios del sector inmobiliario. En la operación han sido arrestados el que fuera consejero de Economía de la Generalitat de Cataluña y Lluis Prenafeta, secretario general de la Presidencia de la Generalitat con Jordi Pujol entre 1980 y 1990.

Otegi era vigilado por la policía. Cruzó la frontera en al menos seis ocasiones para mantener reuniones en Francia. Otegi estaba en libertad condicional y no podía abandonar territorio español salvo con permiso oficial de la Audiencia Nacional. Un permiso que Otegi Solicitó este verano con motivo de unas vacaciones y que le fue denegado.