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El IBEX 35 ha bajado un 0,89% y ha perdido el nivel de 10.000 puntos, afectado por la bajada de los grandes valores. El índice, que abrirá este martes desde 9.982,70 puntos, reduce su revalorización anual hasta el 0,67%. Mientras, la rentabilidad del bono español a diez años en el mercado secundario ha caído hasta el 3,58%, nivel de noviembre de 2005, con la prima de riesgo en 190 puntos básicos.

El IBEX 35 ha terminado la sesión con una subida del 1,94% y ha cerrado en 9.964,60 puntos, apoyado por la apertura alcista de Wall Street. Sacyr ha subido un 2,41%, con lo que recupera parte de las pérdidas registradas la jornada precedente. Mientras, en el mercado de deuda la prima de riesgo ha bajado hasta 196 puntos básicos, con la rentabilidad del bono a diez años en el 3,65%, gracias a la buena subasta del Tesoro, que ha colocado este jueves 5.589,5 millones en bonos a tres y cinco años, por encima del máximo previsto y con nuevas rebajas en el interés.

Las empresas no financieras del IBEX 35 pagan a sus proveedores a 171 días de plazo medio, lo que supone casi triplicar el estipulado por la ley, que es de 60 días, según ha denunciado la Plataforma Multisectorial contra la Morosidad (PMcM). Por sectores, el de la construcción e inmobiliario es el que tiene una mayor demora, ya que se va a los 291 días para pagar de media. Le siguen servicios y comercio (269 días), industria (222) y energía (101).

El IBEX 35 ha subido un 1,24% y ha puesto fin a seis sesiones consecutivas en rojo. El índice ha cerrado en 9.879,10 puntos impulsado por la recuperación de la banca y el repunte de los mercados internacionales y ha reducido sus pérdidas anuales hasta el 0,38%. En el mercado de deuda, la prima de riesgo ha caído hasta 202 puntos básicos, con la rentabilidad del bono a diez años situada en el 3,7%, tras la buena subasta del Tesoro, que ha colocado 3.097 millones en letras a 3 y 9 meses a menor interés.

El IBEX 35 ha caído un 3,64%, lo que ha devuelto al índice al nivel de los 9.800 puntos. El detonante ha sido la devaluación del peso argentino, una moneda debilitada que ha hecho temblar a las compañías con negocios en Latinoamérica. Mapfre y BBVA han sido los valores más castigados con caídas de más del 5% y Telefonica, también con mucha presencia en Argentina, se ha dejado un 4,5%.