La apertura de la mina en 2018 sacó a la luz 49 cadáveres. Los cuerpos fueron arrojados en septiembre de 1936 a un pozo a 27 metros de profundidad, que quedó cubierto de agua, posteriormente se usó como vertedero, se cubrió con tierra y cal y quedó definitivamente sellado con el cierre de la mina en 1988 con un forjado de hormigón.
Foto: Restos encontrados en la Mina Terría en Valencia de Alcántara, en Cáceres (PROYECTO MINA TERRÍA)