El secretario de Organización del PSOE, José Luis Ábalos, ha acusado al presidente de la Generalitat de haber "abusado" de las personas de "buena fe" que, como los socialistas, abogaban por el diálogo, y ha recalcado que ese diálogo debe hacerse siempre "sobre la base del respeto a la ley".
La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, ha advertido de que el Ejecutivo no puede aceptar que se dé validez al referéndum del 1-O ni que se constate por parte de nadie en el Parlament de Cataluña que la mayoría de los catalanes quiere un Estado independiente, por lo que ha anunciado que el Consejo de Ministros celebrará este viernes una reunión extraordinaria para responder a la declaración de Carles Puigdemont.
Los diputados de Junts pel Sí (JxSí) y la CUP han firmado un documento sobre la independencia de Cataluña, después de que el discurso del presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, amenazara con fracturar las filas independentistas.
En su comparecencia ante el pleno del Parlament, Puigdemont ha afirmado que asume el "mandato del pueblo" para que "Cataluña se convierta en un Estado independiente en forma de república", pero ha propuesto acto seguido "suspender los efectos de la declaración de independencia" para abrir en la puerta al diálogo en las próximas semanas.
La declaración de Puigdemont ha motivado los recelos de la CUP y también de ERC y Demòcrates, socios del PDeCAT en JxSí, porque a su juicio no representa una auténtica declaración de independencia, por lo que estos sectores han promovido un documento por escrito para dejar constancia, fuera del hemiciclo, de que la jornada del 1-O debe comportar la proclamación de la independencia.
Rechazo total de la oposición a la declaración de independencia "en suspenso" de Carles Puigdemont. Los líderes de los partidos no independentistas han criticado frontalmente al Govern acusándole de dividir a la sociedad, separar Cataluña de la Unión Europea e insistir en una huida hacia delante sin futuro. Tanto la líder de Ciudadanos, Inés Arrimadas, como el del PSC. Miquel Iceta, han reclamado la convocatoria de nuevas elecciones autonómicas.
La suspensión de la declaración de independencia planteada por el presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, para abrir un período de diálogo, se ha topado con el rechazo frontal de la CUP, hasta ahora respaldo de Junts pel Sí en el Govern, y de la organización juvenil de izquierda radical Arran que ha acusado a Puigdemont, de incurrir en una "traición inadmisible".
El Gobierno insiste en que la unidad de España ni se negocia ni es objeto de ninguna mediación. Considera "inadmisible" la declaración de Puigdemont y aclara, en palabras del ministro de Justicia, que no puede dar por válida una declaración de independencia de la que se solicita su suspensión inmediata.
Algunas fuentes señalan que se estaba estudiando una mediación internacional, mientras que otras apuntan a las discrepancias de la CUP con el discurso del presidente de la Generalitat.
El presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, ha afirmado este martes en el Parlament: "Asumo el mandato del pueblo de que Cataluña se convierta en Estado independiente en forma de república", pero ha planteado al Parlament suspender unas semanas los efectos de una independencia para entrar en una etapa de diálogo.
El líder del PSC, Miquel Iceta, ha considerado este martes que el presidente catalán, Carles Puigdemont, "no puede suspender una declaración (de independencia) que no ha hecho" y le ha pedido convocar elecciones para que los catalanes voten "con garantías", porque "no queremos volver atrás 300 años ni cuarenta". Iceta ha reprochado a Puigdemont que "asuma un mandato discutible y proponga suspender una declaración no hecha. No se puede suspender una declaración que no se ha tomado".
La líder de Ciudadanos en Cataluña, Inés Arrimadas, ha asegurado este martes al presidente de la Generalitar, Carles Puigdemont, que su partido va a salir a ganar "cuando se pongan las urnas de verdad". Arrimadas ha advertido de que la independencia "a plazos" o "en diferido" como la que, ha dicho, ha proclamado Puigdemont, sigue siendo una "declaración de independencia" y un "golpe a la democracia".
El presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, ha asegurado este martes que el pueblo de Cataluña “se ha ganado el derecho a ser un Estado independiente” tras el referéndum del 1 de octubre pero anunció que aplaza una declaración formal "para reducir la tensión" y "emprender un diálogo" que haga posible la secesión del resto de España.