Enlaces accesibilidad
arriba Ir arriba

La parte más contaminante y peligrosa dañada. Además, todo indica que la central deberá soportar nuevos temblores y los expertos aseguran que habrá un fuerte terromoto próximamente.

Fukushima es ya un accidente nuclear tan grave como el de Chernobil, el peor de la historia. La agencia de seguridad nuclear japonesa ha elevado a 7, la máxima, su calificación. Y se ha confirmado el hallazgo de estroncio en la central, un metal que causa leucemia. El primer ministro, sin embargo, ha dicho que la situación se estabiliza.

En Japón, un mes después del terremoto, se ha guardado un minuto de silencio a la misma hora del seísmo de intensidad 8,9 que fue uno de los más devastadores de la historia. El tsunami que siguió causó miles de víctimas y paralizó 11 de los 51 reactores nucleares del país. Siguen los trabajos para reparar los reactores dañados y el Gobierno nipón ha afirmado que se reduce el riesgo de fuga radiactiva en Fukushima mientras la operadora de la central, Tepco, continúa vertiendo agua contaminada al mar.

Dentro de unas horas se cumple un mes del terremoto y el tsunami que ha causado en Japón más de 27mil muertos y desaparecidos. El primer ministro ha visitado las zonas afectadas y ha prometido ayuda. Miles de personas han participado en masivas protestas antinucleares. (10/04/11)

Antes de tomar cualquier decisión sobre cerrar la central de Fukushima hay que saber la condición en la que están los reactores, una labor aún difícil. Una vez que se enfríen los reactores, hay dos opciones: desmantelar la central pieza a pieza o cerrar la central y monitorizarla, como se hizo en España en Vandellós. Se hizo también en 1979 en Three Mile Island (EE.UU). La última solución, más extrema, es sepultar la central bajo un sarcófago de hormigón, como en Chernobyl.

Los trabajadores han logrado tapar la grieta por la que se filtraba agua contaminada al mar. El Gobierno y la propia compañía han pedido disculpas a los afectados por el vertido de agua radiactiva.

  • A estas alturas no está claro cuál será la opción que se tome en Fukushima
  • Las opciones más baratas cargan de responsabilidad a futuras generaciones
  • Será un procedimiento largo, complejo, arriesgado y muy caro

En Japón, las aguas marinas próximas a la central nuclear de Fukushima soportan una radiación de yodo cinco millones de veces superior a los límites legales y un millón de veces más en el caso del cesio-137. Las mediciones se hicieron ayer, antes de empezar a verter al Océano Pacífico 11.500 toneladas de agua contaminada de la planta.