Los más pequeños de la casa plantan cara al coronavirus con mucha imaginación y sentido del humor. Y son más conscientes de lo que pensamos de qué hay qué hacer para combatirlo. Conocen bien los protocolos de higiene, y saben por qué llevan varios días sin salir de casa.
Participan con ilusión en el aplauso diario a los sanitarios y las personas que están trabajando activamente para superar esta situación de crisis. Y nos dicen claramente "Ponle freno al coronavirus" porque "nunca fue tan fácil salvar vidas" por eso tienen claro y aplican el hasgstag, #YoMeQuedoEnCasa.