Josep Borrell, Alto representante de la Unión para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, asegura que ahora mismo todos sus esfuerzos están centrados en sacar de Afganistán a quienes han colaborado con la UE y corren peligro. Eso no excluye, asegura, que también se esté pensando en cómo ayudar a miles de personas que quieren abandonar el país. Borrell dice que hay que afrontar la realidad y que esa es que el mundo occidental ha fracasado: “Lo que ha ocurrido en Afganistán es una derrota del mundo occidental y eso hay que mirarlo de frente y tener el valor de reconocerlo". Sobre el diálogo con los talibanes, no tiene duda. “Algunos se han escandalizado, pero claro que hay que hablar con ellos. “Tenemos que hablar con ellos (los talibanes). No podemos abrir una vía de seguridad del aeropuerto si no hablamos con quien ha tomado el control de Kabul”.
Estados Unidos ha admitido que muchas de las armas y equipos de defensa con los que combatió durante dos décadas de guerra en Afganistán han caído en manos de los talibanes. Y ante el caos de la evacuación, el presidente, Joe Biden, sigue defendiendo su decisión de retirarse de Afganistán, a pesar de que la caída de Kabul recuerda mucho a la de Saigón. En el imaginario estadounidense la comparación es difícil de esquivar.
FOTO: El secretario de Prensa del Departamento de Defensa de Estados Unidos, John Kirby, habla mientras el Mayor General del Ejército, William Taylor, escucha durante una conferencia de prensa en el Pentágono. Alex Wong/Getty Images/AFP
Poco a poco los talibanes se hacen un hueco en la escena internacional: la UE ha admitido que habrá que hablar con ellos y los talibanes prometen un acceso seguro y negocian un calendario de salidas con EE. UU. De momento la tensión en la evacuación desde el aeropuerto de Kabul, bajo control del ejército estadounidense, se ha rebajado tras el caos del lunes.
Los talibanes tienen que garantizar una salida segura de los que quieran irse, ha dicho el secretario general de la OTAN, quien ha acusado a los líderes políticos afganos del colapso del país. Alemania ha dicho que valorarán a los talibanes por sus hechos al margen de sus palabras amistosas de estos días.
Foto: Afganos esperan en el exterior del aeropuerto internacional Hamid Karzai para huir del país. EFE/EPA/STRINGER
Quién es su líder, quiénes son ellos, de qué viven y quién les financia. Son las preguntas que se ponen ahora sobre la mesa. Loslíderes talibanes actuales estuvieron en el poder en 1996, pero ahora dominan más los medios de comunicación y las campañas de imagen. Sus primeras declaraciones y actuaciones, presentándose como moderados, parece que son una farsa. Su objetivo, dicen los expertos, es el mismo de siempre: desarrollar un estado islámico, no un estado de derecho o moderno. El dinero, además de las plantaciones de adormideras que se transforman en opio y del tráfico de drogas, proviene también de los impuestos que han ido cobrando a los diferentes jefes locales, a los que han obligado a pagar para trasladarse entre territorios y para sus intercambios comerciales internos. InformaAurora Mínguez.
El presidente estadounidense ha comparecido en la Casa Blanca para dirigirse a la Nación y defender su actuación frente al conflicto afgano, especialmente la retirada de las tropas norteamericanas del país asiático.
Según Reuters, cinco personas han perdido la vida intentando subirse a un avión que les aleje de los talibanes, que han recuperado el control del país veinte años después. La población se agolpa en el aeropuerto e intenta huir de Afganistán, temerosa del código talibán, especialmente cruel con minorías y mujeres.
Los países occidentales han acelerado las repatriaciones de los suyos, mientras que las críticas a la Casa Blanca se suceden: varios responsables del Pentágono adviertieron a Biden del riesgo de que el país cayera en una guerra civil; por su parte, China ha expresado su deseo de mantener relaciones amistosas con el nuevo régimen y Rusia, preocupada por el triunfo talibán, mantienen abierta su embajada en Kabul y mañana tendrán un primer contacto oficial con ellos. Informan Santiago Barnuevo, Gloria Parrilla, Carmen Buergo y Aurora Mínguez.
El caos se ha adueñado del aeropuerto de Kabul, donde miles de afganos intentan huir del país en los aviones que evacúan a los ciudadanos extranjeros, después de que Afganistán haya caído bajo el control de los talibanes.
La multitud ha comenzado a concentrarse en el aeropuerto Hamid Karzai de madrugada con la esperanza de poder abandonar el país, aunque muchos no cuentan ni siquiera con pasaporte. Los soldados estadounidenses han disparado al aire para evitar que los civiles invadieran la pista e intentaran abordar los aviones, pero no han logrado impedirlo.
Según Reuters y medios como el Wall Street Journal, varias personas han muerto en el aeródromo, aunque no está claro si ha sido por disparos o en las estampidas que se han producido.
En el exterior del aeropuerto se han apostado milicianos talibanes. Los dirigentes talibanes afirman haber ocupado ya el 90% de los edificios oficiales y han dado por finalizado el conflicto armado.
El avance de los talibanes sobre Kabul ha hecho que los países occidentales aceleren los planes para evacuar a su personal diplomática. Estados Unidos, Francia y Gran Bretaña ya han comenzado y España ha asegurado que lo hará de forma inminente.
FOTO: Un helicóptero militar estadounidense sobrevuela Kabul. REUTERS/Stringer.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ha defendido la decisión de abandonar Afganistán. Ha dicho que no se puede justificar una "presencia americana interminable". Además, Biden ha amenazado a los talibanes con una respuesta militar "rápida y contundente" si atacan al personal estadounidense o su embajada en Afganistán, ante el temor a que ese grupo insurgente avance sobre Kabul.
Foto: El presidente de EE.UU., Joe Biden (MANDEL NGAN/AFP)