Enlaces accesibilidad
arriba Ir arriba

La Policía británica ha elevado a 30 la cifra de víctimas en el incendio del miércoles en la torre residencial Grenfell y ha admitido que es posible que muchas de las víctimas no puedan ser identificadas. El comandante de la Policía Metropolitana de Londres (Met), Stuart Cundy, ha dicho que "tristemente, hay un riesgo de que no podamos identificar a todo el mundo", y ha agregado que espera que el número total de fallecidos no sea superior a "tres cifras". El diario The Sun ha elaborado una lista de 65 desaparecidos.

Por tercer día consecutivo, los bomberos revisarán las plantas de la torre, compuesta por 120 apartamentos, muchos de ellos de protección social, mientras aumentan las críticas sobre la seguridad en otros edificios similares en el Reino Unido.

Las autoridades son cuestionadas por el estado en que se encontraba el edificio después de que algunos residentes denunciasen que las alarmas de incendio no saltaron y también por el material utilizado en el revestimiento del inmueble, compuesto por polietileno, que explicaría la rapidez con que se propagaron las llamas en la madrugada del miércoles. El incendio, dicen era una tragedia anunciada.

La primera ministra británica, Theresa May, ha dispuesto una investigación oficial sobre la tragedia a fin de llegar "al fondo" de lo ocurrido para que una tragedia así no vuelva a ocurrir. May es también hoy protagonista, a su pesar, en los medios locales, que la critican por no haber hablado este jueves con los rescatados de la torre cuando visitó el barrio del norte de Kensington, donde está el edificio y donde habló con agentes de Policía y los bomberos que trabajaron para contener el fuego y rescatar a los residentes. Para paliar esas críticas, la premier ha visitado esta mañana a los heridos en uno de los hospitales donde están siendo atendidos.

El líder de la organización yihadista Estado Islámico (EI), Abu Bakr al Bagdadi, habría muerto en un ataque de la aviación rusa a las afueras de la localidad siria de Al Raqa, según ha anunciado este viernes el Ministerio de Defensa de Rusia que, no obstante, advierte de que está tratando de verificar la información. "Según informaciones que recibimos por diversos canales, el líder del Estado Islámico, Abu Bakr al Bagdadi, se encontraba en la reunión de jefes del EI" atacada por la aviación rusa el pasado 28 de mayo "y fue aniquilado" por los aviones Su-35 y Su-34, informa el Ministerio, citado por medios locales. En el ataque habrían fallecido cerca de 300 terroristas y 30 altos funcionarios del Consejo de Guerra del Estado Islámico, entre los que figuran Abu Al Jadji —el 'emir' de Raqa—, Ibrahim Al Jadj —responsable del control militar de la región que rodea a Raqa— y Suleimán Al Shauaj —jefe de seguridad de la agrupación—. Posteriormente, el portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, ha rebajado la cifra de terroristas alcanzados a un centenar.

El fiscal especial que examina la posible injerencia rusa en los comicios presidenciales de 2016 en EEUU, Robert Mueller, está investigando si el presidente Donald Trump cometió obstrucción a la Justicia.

Así lo aseguran The Washington Post y el New York Times. Ambos diarios citan fuentes cercanas a la investigación que aseguran que Mueller quiere entrevistar a miembros de los servicios de inteligencia. Por su parte, el Wall Street Journal subraya que el fiscal especial indaga el despido del anterior director del FBI, James Comey, cesado cuando investigaba las supuestas relaciones de la administración Trump con Rusia.

El equipo de Trump ha tachado la filtración de "ilegal" e "intolerable".

El delito de obstrucción a la Justicia puede provocar un proceso de destitución (impeachmentcontra Trump en el Congreso, algo que apoyan legisladores de la oposición demócrata si se dan las circunstancias pertinentes.

Mueller fue nombrado fiscal especial para el caso ruso tras el despido fulminante de Comey, quien ha revelado que Trump, antes de destituirle, le pidió que "dejara pasar" las pesquisas sobre los vínculos de su ex asesor de Seguridad Nacional, Michael Flynn, con Moscú.