La fragata rusa Almirante Gorshkov ya está en Sudáfrica para participar en unos ejercicios navales conjuntos con China y Sudáfrica, que se extenderán hasta el próximo lunes.
Según el ministerio de Defensa ruso, estos ejercicios se centrarán en "contrarrestar las amenazas de seguridad en el mar". El barco está equipado con misiles supersónicos Zircón, sin competidor alguno, de lo que ya ha presumido el presidente Vladímir Putin.
Putin se ha reunido con el máximo diplomático chino, Wang Yi. La visita a Moscú reafirma la sólida relación ante las dos potencias. Por su parte, Estados Unidos ya ha expresado su temor a que China pueda suministrar armas a Rusia para usar en Ucrania.