Enlaces accesibilidad
arriba Ir arriba

Con paraguas, desafiando a un intenso chaparrón, los fieles de Silvio Berlusconi se han acercado a su residencia de Arcore, cerca de Milán, para rendirle homenaje. Una multitud de periodistas para cubrir la capilla ardiente de Il Cavaliere. Dentro de la que fue su mansión, solo los más allegados.

Su familia lo ha decidido por razones de orden público, así que muchos de sus seguidores no podrán velar al que fue uno de los personajes políticos más influyentes de Italia, admirado por muchos.

El funeral será mañana y asistirán el presidente de la República, Sergio Matarella, y la primera ministra, Giorgia Meloni, en Milán, la cuna de un magnate que protagonizó numerosos escándalos de toda índole, desde sexuales a económicos y que marcó una época en la política y en los medios de comunicación italianos.

FOTO: EFE/EPA/MATTEO CORNER

Hasta el último bombardeo registrado por parte de Rusia en Ucrania, que ha dejado varios desaparecidos y varias víctimas mortales, Kiev aseguraba que había recuperado siete localidades, algo que niegan los rusos.

La vida del ex primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, ha estado llena de luces y sombras. Fue empresario, dueño de un equipo de futbol, político y se convirtió en el centro de numerosos escándalos, casos de corrupción, que incluso condujeron a su inhabilitación.

Ha muerto como senador en activo, con su partido Forza Italia, cuyo futuro es ahora una incógnita. Atrás deja todas las polémicas protagonizadas por él, los escándalos de las fiestas en su residencia, los 'bunga-bunga', donde le acusaron de llevar menores o de incitar a la prostitución.

Foto: AP Photo/Luca Bruno

La primera ministra italiana, Georgia Meloni, ha publicado un mensaje grabado en su despacho gubernamental en el que define a Silvio Berlusconi, fallecido este lunes, como uno de los hombres más influyentes de la historia de Italia. La mandataria recuerda su trayectoria de éxito en los negocios y en la política y destaca su coraje para defender sus ideas y la importancia que tuvo para su país, al que ha enseñado "a no rendirse".

Tanto Meloni, líder de los ultraderechistas Hermanos de Italia, como su vicepresidente Matteo Salvini, de la Liga, ambos socios de Berlusconi en la coalición de Gobierno de centro-derecha, han cancelado su agenda. La Cámara de Diputados también ha suspendido sus sesiones y el Senado, al que Berlusconi volvió el octubre pasado tras nueve años de inhabilitación, mantiene su bandera a media asta.

Cuando al presidente ruso, Vladímir Putin, le empezó a ir mal en la guerra de Ucrania, pidió ayuda a los chechenos. Su gran aliado, el presidente Kadírov, movilizó a miles de soldados para lucha en Ucrania, pero no todos los chechenos se juegan la vida por Rusia. Muchos luchan junto a los ucranianos.

Se habla de una primera capilla ardiente en Arcore y mañana sus restos podrían trasladarse a la sede de Mediaset, también en Milan. El imperio de comunicación que levantó porque Berlusconi, antes que político, fue un hombre de empresa. Pero sobre todo se le conocerá como el presidente del consejo de ministros que más tiempo ha estado gobernando en Italia. Una carrera política que parecía haber llegado a su fin hasta las últimas elecciones, el año pasado, cuando su partido entró a formar parte de la coalición de derechas que preside hoy Giorgia Meloni.

De hecho, digamos que Berlusconi ha sido uno de los principales engranajes de esa coalición, no siempre bien avenida. Hoy el presidente de la Republica le recuerda como un gran líder político, las condolencias han llegado también del mundo de la empresa y del deporte Arrigo Sachi, ex entreenador del Milan, el equipo que compró Berlusconi y que tantos trofeos logró.