La puerta de los Leones se ha abierto para recibir este martes a las altas instituciones del Estado. Don Felipe ha saludado a un grupo de ciudadanos que esperaban en la calle y ya en el escritorio del reloj ha saludado a los cuatro vicepresidentes, los dos ponentes constitucionales o al líder de la oposición, Pablo Casado. Cuatro décadas después del fracaso del 23F, el rey ha revindicado la figura de su padre, el gran ausente. Felipe VI ha elogiado el valor de la libertad y ha asegurado que todos estamos obligados a defender proteger y preservar la democracia. Unas palabras que el vicepresidente Pablo Iglesias no ha aplaudido. Por su parte, la presidenta del Congreso, Meritxell Batet, ha advertido de los peligros que suponen el populismo y la polarización y ha pedido unidad de todas las instituciones ante las amenazas de ruptura Constitucional. El acto ha finalizado con un almuerzo, también en el Congreso, después de un recorrido por el hemiciclo donde Miquel Roca les ha explicado cómo vivió él aquel 23 de febrero.
Foto: EFE/ Juan Carlos Hidalgo