Tensión en Colombia, donde tras más de diez día de paros, protestas y enfrentamientos violentos, las organizaciones sociales cifran en casi cincuenta los fallecidos. Las familias denuncian violencia policial.
Colas kilométricas y esperas interminables para conseguir gasolina en Cali...Aguantar toda la noche y ser la primera en la fila, no garantiza nada...La cantidad, también es limitada...La escasez es consecuencia de 11 días de saqueos y bloqueos...En esta fila, algunos critican los medios pero la mayoría justifica los fines...Estas marchas, en otros puntos de Cali, les piden que despejen las calles. FOTOGRAFÍA: Luis ROBAYO / AFP.
La periodista colombiana Constanza Jerez, quien se encuentra en Bogotá, ha afirmado en una entrevista en el Canal 24H que la situación en su país "viene por un infortunado cóctel de situaciones que han ido creciendo", como el asesinato de líderes sociales, el "aumento del asesinato de niños y del reclutamiento forzado". "En este momento lo que quiere el país es un cambio de fondo para que no siga continuando todo lo que viene pasando", ha indicado la periodista, refiriéndose a las protestas que se han llevado a cabo en Colombia desde el 28 de abril.
Jerez ha explicado, además, que el presidente Iván Duque se ha reunido este viernes con la coalición de la oposición, pero que los colombianos que están manifestándose esperan "que se abra a otras personas y otras voces, porque si no vamos a seguir conversando los mismos y no vamos a llegar a ningún lado". La periodista colombiana también ha señalado que "hasta el momento no hay fecha para que paren las protestas" y que en diferentes partes del país "estamos con desabastecimiento". "Necesitamos que haya una conversación más amplia y que haya un diálogo y unos acuerdos para que esto cese", ha añadido.
Hoy llega a los cines "El olvido que seremos", la novela de Héctor Abad Faciolince que Fernando Trueba ha llevado a la gran pantalla, con Javier Cámara, en la piel del médico colombiano...
Este viernes llega a los cines El olvido que seremos, la cinta de Fernando Trueba ganadora del Goya 2021 a la mejor película iberoamericana, que también fue preseleccionada para los Oscar 2021. Pero, además, se publica la excelente adaptación que Tyto Alba (Badalona, 1975) ha realizado en cómic. Como la novela original de Héctor Abad Faciolince (Medellín, 1958), este El olvido que seremos (Salamandra Graphic) es un canto maravilloso al amor paterno-filial y un clásico de la literatura hispanoamericana.
Al menos 24 presuntos narcotraficantes y un agente de Policía han muerto en una gran redada policial en una favela en Río de Janeiro. La favela es bastión de una de las organizaciones criminales más importantes de Brasil y ha sido la redada más letal en los últimos 16 años en la ciudad. La Oficina de Derechos Humanos de Naciones Unidas ha pedido una investigación independiente y teme que la Policía carioca oculte pruebas de los tiroteos.
Después de diez días desde que se iniciaron las protestas en Colombia, el fin de los abusos policiales se ha convertido en una de las principales exigencias de las manifestaciones. La lista de reclamos es ahora más larga: el desempleo, el manejo de la pandemia, la corrupción, las muertes… El Gobierno del presidente Iván Duque busca una salida en un diálogo nacional del que muchos se sienten excluidos, mientras que los manifestantes insisten en que, de momento, seguirán en las calles.
La intensa confrontación armada se vivió desde tempranas horas en la zona norte de la ciudad, en la favela de Jacarezinho, una de las comunidades más deprimidas y violentas de la urbe, cuando cerca de 200 agentes policiales fueron enviados a la barriada para reprimir a una banda de narcotraficantes.
Sin embargo, los vecinos protestan y aseguran que algunos de los muertos no iban armados. La Policía, además, tiene prohibido realizar este tipo de operaciones durante la pandemia.
De acuerdo con las autoridades, la banda de narcotráfico que controla la zona viene reclutando menores de edad para realizar acciones criminales.
La favela de Jacarezinho es una de las bases del 'Comando Vermelho' ('Comando Rojo), la mayor banda de narcotráfico en Río.
Nueva jornada de protestas en Colombia, y van nueve consecutivas, sin que el diálogo nacional que está promoviendo el presidente Duque, logre aplacarlas. Las consecuencias de los paros y los bloqueos afectan ya a los suministros. Empiezan a escasear algunos alimentos, la gasolina e incluso el oxígeno, cuando el país atraviesa el peor momento de la pandemia. En algunas de las ciudades más afectadas se han logrado abrir corredores humanitarios. La chispa que prendió la mecha de la indignación fue una reforma fiscal, ya retirada, pero el malestar es mucho más profundo. El presidente colombiano no recibirá a los organizadores de las protestas hasta el lunes y no contempla sentarse directamente con los jóvenes, los que están pagando un precio más alto por salir a protestar. Organizaciones de derechos humanos hablan de 31 muertos en las manifestaciones, la Defensoría del Pueblo, de 24, y la Fiscalía lo rebaja a 11 y asegura que solo 3 murieron a manos de los cuerpos de seguridad. La comunidad de colombianos en la capital de España se ha manifestado para denunciar la situación que vive su país. Al grito de "SOS Colombia", miles de manifestantes con banderas y camisetas de la selección de fútbol colombiana se agolparon en las inmediaciones del parque madrileño del Retiro, protestando contra la represión policial y pidiendo la derogación de la reforma tributaria del presidente Iván Duque.
Después de ocho días de protestas y graves disturbios, las autoridades colombianas han reconocido la muerte de al menos 24 personas y cerca de 1.000 heridos. Las protestas continúan vivas y el fiscal general va a imputar a agentes de Policía por tres homicidios. Los manifestantes pueden presumir ya de dos victorias: la retirada de la reforma tributaria y la dimisión del ministro de Hacienda, pero también exigen una renta básica, la defensa de la producción nacional y un plan de vacunación masiva.
En Colombia llevan ocho días de movilizaciones y la presión contra el Gobierno no afloja. Las ONG hablan de 40 manifestantes muertos, 400 detenidos y hasta 100 desaparecidos.
Los disturbios recorren el país de lado a lado mientras aumentan las denuncias por la brutalidad de la policía. Denuncias que estarían detrás de las cifras de muertos que se manejan y que generan incluso discrepancias entre las instituciones públicas. La Fiscalía señala 11 fallecidos tras ocho días de protestas mientras que la defensoría del pueblo habla de 24 y algunas organizaciones sociales dicen que tienen constancia de al menos 31 muertos.
Las organizaciones sindicales y políticas siguen en las calles para exigir un cambio de políticas al presidente Ivan Duque y sobre todo, para exigir el fin de la represión policial. En el centro de Bogotá, los antidisturbios usaron gases lacrimógenos para alejar a un grupo de gente que intentaba acercarse al Congreso, un edificio situado junto a la Casa de Nariño, la sede de la presidencia. El gobierno insiste en que las protestas tienen que cesar, que hay ciudades donde hay problemas de abastecimiento de comida y combustibles y que todos los colectivos deben acudir al diálogo nacional convocado por el presidente, aunque los organizadores del paro no serán recibidos hasta el lunes.
El exministro de Salud, Nelson Teich, que abandonó el Gobierno en mayo de 2020 tras un mes en el cargo, ha comparecido este miércoles en la comisión parlamentaria que investiga posibles "omisiones" del Ejecutivo de Jair Bolsonaro en el combate a la pandemia.
Teich ha confirmado querecibió presiones del presidente Bolsonaro para recomendar cloroquina contra la COVID-19 en la sanidad pública, lo que a la postre precipitó su renuncia al cargo.
Bolsonaro ha defendido públicamente el uso de la cloroquina y su derivado, la hidroxicloroquina, para el coronavirus, a pesar de que su eficacia contra esa no enfermedad no está comprobada científicamente. En la víspera, el primero de los cuatro ministros de Salud que ha tenido Brasil desde el inicio de la pandemia, el también médico Luiz Henrique Mandetta, afirmó que Bolsonaro ignoró todas las advertencias que él y su equipo le trasladaron sobre la gravedad del SARS-CoV-2.