Cientos de personas han acampado a las afueras del Parlamento de Wellington, en Nueva Zelanda. Son ya tres días de protestas inspiradas en el movimiento “Convoy por la Libertad” de Ottawa, Canadá. La policía neozelandesa ha arrestado a más de 100 manifestantes que se oponen a la obligatoriedad de las vacunas.
"Nunca hemos visto una ocupación de este calibre", ha afirmado el comandante de la Policía de Wellington, Corrie Parnell, al referirse a estas protestas, que incluyen el bloqueo de calles y la colocación de decenas de tiendas de campaña en los exteriores del Parlamento.
Las personas arrestadas que han entrado en los terrenos del Parlamento, se enfrentan a cargos como allanamiento y obstrucción, y serán puestos en libertad bajo fianza para comparecer ante el tribunal.
El dispositivo policial se da en respuesta al 'Convoy 2022 NZ' que ha movilizado a centenares de personas de todas partes del país para protestar en la capital neozelandesa contra la obligatoriedad de las vacunas contra la COVID-19 y pedir que se restauren las libertades perdidas durante la pandemia, entre otras demandas.
A lo largo de esta jornada, algunos manifestantes han respondido con insultos y lanzando objetos a los agentes, según 'Radio New Zealand'.
Nueva Zelanda, cuyo gobierno implementó una de las estrategias contra la COVID-19 más estrictas del mundo con confinamientos con pocas infecciones y el cierre de las fronteras internacionales, acumula unas 18.500 infecciones y 53 fallecidos, y tiene a un 94 % de la población con la pauta completa de la vacuna.