El ministro del Interior, Fernando Grande Marlaska, ha defendido este sábado la actuación policial ante los últimos saltos a la valla de Melilla y ha insistido en que las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado actúan "en parámetros de proporcionalidad y necesidad". Marlaska, que ha viajado este sábado a Melilla, ha afirmado que no hay "ningún inconveniente" en que se evalúe su actuación.
FOTO: El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, durante su visita a la delegación del Gobierno de Melilla. EFE / Miguel Osés
El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, niega que se haya devuelto a Marruecos a los dos jóvenes y asegura que en Ceuta se está cumpliendo en todo momento con la ley. Por su parte, el Gobierno de la ciudad autónoma guarda silencio.
El ministro de Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha advertido este jueves de que cualquier tipo de amenaza es "grave para la convivencia" por lo que se investigará el acoso y "amenazas" denunciadas por la familia de un niño en Canet de Mar (Barcelona), señalada tras conseguir que el menor pueda recibir un 25% de los cursos lectivos en castellano.
"Toda amenaza o posible amenaza son un acontecimiento grave para la convivencia. Serán investigadas en su caso y tengamos confianza tanto en la investigación de las fuerzas de seguridad como del Poder Judicial", ha declarado Marlaska a la prensa en Bruselas, en donde ha asistido a una reunión de ministros europeos de Interior.
Un total de cinco ONG denuncian que dos menores de 15 y 16 años que llegaron en mayo a Ceuta fueron expulsados el pasado 28 de noviembre tras ser interceptados por la Guardia Civil cuando intentaban subir al ferry que conecta la ciudad con la Península. La Coordinadora de Barrios habla de grave vulneración de las legislación española dado que ellos formarían parte del grupo de 12 menores cuya expulsión fue paralizada en agosto por el juzgado número 1 de Ceuta. Tanto la Coordinadora de Barrios como la Fundación Raíces, que ejercen la defensa de los chicos, han puesto los hechos en conocimiento del Ministerio de Interior, la Fiscalía y el Defensor del Pueblo y han pedido una investigación.
El diputado de Vox Ignacio Gil Lázaro ha denunciado la "miserable" y "humillante" reforma de la Ley de Seguridad Ciudadana, al entender que el Gobierno quiere "regalar" el control de las calles al conjunto de la extrema izquierda y a los partidos herederos de quienes "hicieron del crimen su profesión".
También ha aludido a los "ministros comunistas con cartera que jalean cualquier forma de terrorismo" y a una "chusma violenta que existe y está ahí, y que sigue pretendiendo quemar vivo algún día a un policía". Según Gil Lázaro, el plan del Gobierno es "facilitarse las cosas" para que, cuando pierdan el poder, "poder quemar las calles, que es lo que ha hecho sistemáticamente".
El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, le ha respondido que el único interés de Vox es "generar un clima de odio" y que, para ello, "instrumentaliza" a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado. "¿Sabe cómo somos nosotros patriotas? Con 10.000 puestos más de agentes, subiendo sueldos, con 600 millones para infraestructuras", ha comentado el ministro, que también ha dicho en sus intervenciones que ahora no hay un "uso partidista" de Interior.
La portavoz de Interior del PP, Ana Vázquez, ha criticado que la reforma de la llamada'ley mordaza' "no solo deja a los policías en situación de inseguridad, sino también a los ciudadanos", pues cree que imponer multas en función de la renta supondrá que "si no tienes dinero, no pagarás nada".
En una entrevista en La Hora de la 1, la diputada 'popular' se ha mostrado contraria a la reforma y ha defendido que la actual ley es "constitucional", por lo que su formación saldrá a la calle "para defenderla".
FOTO: Ana Vázquez interviene en un pleno del Congreso. EFE/J.J. Guillén