La presidenta de la Comunidad de Madrid y candidata del PP a las elecciones del 4M, Isabel Díaz Ayuso, ha retado este martes a los partidos de izquierda a que apoyen su proyecto en una hipotética investidura si no quieren que Vox llegue al Gobierno, una petición que tanto el PSOE como Más Madrid y Podemos han rechazado.
Esta nueva jornada de campaña electoral también ha estado marcada por la petición del líder socialista, Ángel Gabilondo, de hacer un 'cordón sanitario' a Vox, algo que Ciudadanos a rechazado. Mientras que la condición de Vox para pactar con el PP es “impedir el asalto comunista".
El diario de campaña de este martes está marcado por una encuesta de Metroscopia que otorga una amplia victoria a Isabel Díaz Ayuso en las elecciones del próximo martes. Ganaría, doblando los apoyos actuales, pero no alcanzaría los 69 escaños de la mayoría absoluta. Sin embargo, ella insiste en que puede conseguirlo, que quiere gobernar sola, “con libertad” y, por tanto, sin VOX. En Radio Nacional, la candidata del PP ha retado al PSOE a que la apoye sin pedir nada a cambio. Ayuso culpa al Gobierno del clima de tensión generado por las cartas amenazantes y habla de circo. VOX acusa a la ministra Maroto de imprudente y el PSOE sigue insistiendo en el peligro de esta escalada de tensión. Culpa a extrema derecha. También lo hace el candidato de Unidas Podemos, Pablo Iglesias. Mónica García, Más Madrid, la segunda gran beneficiada de las encuestas de hoy, pide derrotar este ambiente sin ruido. Dice que solo hay que hablar de lo que le interesa a la gente. Ciudadanos prefiere ignorar los sondeos y da por hecho que si lograrán mantenerse en la Asamblea.
La candidata de Más Madrid en las elecciones del 4M, Mónica García, ha asegurado que su auge en las encuestas de cara a los próximos comicios se debe a que su formación "ha hecho una oposición más contudente" y "propositiva".
En una entrevista en La Hora de la 1, García ha afirmado que "hablar de lo que preocupa" a la gente es lo que está permitiendo a su formación "conectar" con los votantes.
Sobre el buen resultado que auguran las encuestas para la presidenta regional y candidata del PP a la reelección, Isabel Díaz Ayuso, García ha considerado que se debe a que "se presenta por tres partidos", en alusión a Vox y Ciudadanos, y ha que "lleva dos años en campaña", haciendo "una política de confrontación con (Pedro) Sánchez".
Sin embargo, se ha vuelto a mostrar muy crítica con la gestión que ha hecho de la pandemia Ayuso que ha tachado de "malísima".
Las amenazas por carta a Pablo Iglesias, candidato de Unidas Podemos, Fernando Grande Marlaska, ministro del Interior, María Gámez, directora de la Guardia Civil y, la más reciente, Reyes Maroto, ministra de Industria, Comercio y Turismo y candidata a la vicepresidencia de la Comunidad de Madrid si ganase Ángel Gabilondo, han recrudecido los mensajes de cara al tramo final de la campaña electoral para los comicios del 4M en la Comunidad de Madrid.
La amenaza que ha recibido la ministra de Industria, Reyes Maroto, este lunes por medio de una carta con una navaja ensangrentada ha marcado toda la campaña. Todos los partidos y candidatos se han lanzado a la condena de lo ocurrido.
La campaña electoral de Madrid está marcada hoy por un nuevo episodio de amenazas. Reyes Maroto, la ministra de Industria propuesta por Gabilondo como futura vicepresidenta económica madrileña, ha recibido un sobre con una navaja. Se investiga si está ensangrentada o pintada de rojo. El mensaje del PSOE, Más Madrid y Unidas Podemos vuelve a ser que no se puede blanquear el fascismo y exige al PP que aclare qué hará si gana las elecciones. Pablo Casado ha respondido condenando la amenaza. VOX sigue poniendo en duda la veracidad de las cartas pero añade que han condenado y condenan todo tipo de violencia.
La candidata de Más Madrid, Mónica García, alerta de los riesgos que puede suponer que VOX apoye un gobierno del PP y entre en las instituciones de Madrid. “Se ha puesto sobre la mesa lo que nos estamos jugando, que Monasterio esté en la Consejería de Educación y la intolerancia llegue a las pizarras”, ha dicho en RNE. Por eso, añade, es un riesgo que gane el PP: “La señora Ayuso ha convocado estas elecciones para cambiar de socio. Se siente cómoda con Monasterio”. Da por hecha la unión de Más Madrid, PSOE y Unidas Podemos y defiende que “Ayuso tiene que ser la que no deje paso. Es la que tiene que cerrar la puerta y abstenerse de que gobierne la ultraderecha. Los demás lo tenemos claro”. Eso sí, no aclara si Mas Madrid estaría dispuesto a abstenerse para evitar que el PP necesite los votos de VOX para formar Gobierno. Mónica García anima al votante de izquierdas para que se movilice y garantiza la unidad de esos tres partidos: “Sabemos qué es lo que de verdad importa en Madrid y lo que importa es lo que tenemos enfrente. Creo que es una de las cosas que más anhelaba el votante progresista”. No ve un problema en que se hayan presentado por separado Más Madrid y Unidas Podemos porque, asegura, pueden hacer la misma función que “dos antibióticos”. En ese hipotético gobierno de unidad si que se mantiene la diferencia de criterios en cuanto a la política fiscal porque, pese a la propuesta del PSOE, Mas Madrid apuesta por una subida de impuestos: “La CAM tiene un desequilibrio fiscal y eso hay que abordarlo. Los que más tienen deben ser los que más aportan”. Mónica García argumenta que su proyecto político afronta “los problemas cotidianos, los de verdad” y se compromete a poner en marcha si llega al Gobierno un nuevo plan de vacunación. “La vacunación está siendo una chapuza y teniendo la herramienta que nos saque de esta pesadilla nos la tenemos que tomar en serio y no usarla como una herramienta de propaganda, sino como una herramienta para la salud”, ha concluido.
Ocho días después de su inicio, los partidos endurecen sus discursos en busca de la movilización de cara al 4 de mayo y recrudecen el tono de los ataques a sus adversarios, reforzando dos bloques: el de la derecha y el de la izquierda.
La campaña para presidir la Comunidad de Madrid durante los próximos dos años llega a su ecuador y lo hace con duros ataques mutuos entre los candidatos, que acentúan su división en dos bloques enfrentados. Todos buscan una mayor movilización de los votantes.
Además, este domingo los ‘populares’ han criticado el acto del PSOE en Getafe. Les acusan de saltarse las restricciones sanitarias y celebrar el mitin en una zona confinada. La alcaldesa de Getafe, del PSOE, lo desmiente: dice que está fuera de la zona restringida y que se lleva utilizando sin limitaciones durante meses.
Los candidatos de PSOE y Unidas Podemos, Ángel Gabilondo y Pablo Iglesias, llaman a elegir el 4M entre "democracia" y "fascismo" y a parar un Gobierno de PP y Vox, que insiste en cuestionar las amenazas de muerte. PP y Ciudadanos, por su parte, se desmarcan entre ambos bloques.
Todos los actos de campaña han estado enfocados en las amenazas de muerte recibidas por el candidato de Unidas Podemos al 4M, Pablo Iglesias, el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, y la directora de la Guardia Civil, María Gámez. Todos los candidatos menos Vox han condenado estas amenazas. Rocío Monasterio, sin embargo, ha insistido en celebrar la macha de Iglesias de un debate electoral: "Cierre la puerta al salir".
La campaña electoral del 4M ha dado un vuelco completo este viernes y ha alcanzado un nivel de crispación como nunca hasta ahora. La izquierda ha decidido plantar a Vox tras un segundo debate electoral que ha terminado muy pronto tras la marcha del candidato de Unidas Podemos, Pablo Iglesias, y el rechazo de continuar de Ángel Gabilondo (PSOE) y Mónica García (Más Madrid). El motivo ha sido que la candidata de Vox (Rocío Monasterio) ha insistido en cuestionar las amenazas de muerte recibidas por Iglesias, por el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska y por la directora de la Guardia Civil, María Gámez. Y como consecuencia, se han cancelado los debates electorales de RTVE y La Sexta, previstos para el próximo 29 y este 23 de abril, respectivamente, porque tanto Iglesias como García han rechazado debatir con Vox.
No habrá más debates electorales en la Comunidad de Madrid ante la cancelación de los dos previstos para la próxima semana, uno en RTVE y otro en LaSexta. La corporación pública ha anunciado que cancela el debate ante la anunciada ausencia de varios candidatos y para no perjudicar la obligada proporcionalidad y neutralidad de la Radio Televisión Pública.
Los partidos de izquierda se niegan a debatir con Vox hasta que su candidata a presidir la Comunidad de Madrid no condene las amenazas de muerte recibidas por e candidato de Unidas Podemos, Pablo Iglesias, el ministro de Interior, Fernando Grande-Marlaska, y la directora de la guardia Civil, María Gámez, en forma de carta con cuatro balas, y se retracte de sus palabras en las que cuestiona su veracidad. Rocío Monasterio, en Las mañanas de Radio Nacionalcon Íñigo Alfonso, ha declarado que “no se cree nada”. En otra entrevista en TVE, Pablo Iglesias avisaba: “Si no se retracta nos replantearemos estar en ningún espacio con vox”
En un debate horas después en la Cadena SER, el candidato de Unidas Podemos cumplía su palabra y se retiraba: “Es un error normalizar las barbaridades de la ultraderecha”. También lo hacían Ángel Gabilondo y Mónica García.
El candidato socialista ha dicho que “esto va de democracia” en un acto acompañado por el ministro de Interior, que ha pedido unidad frente al fascismo. El líder nacional de Más Madrid ha señalado que “lo más grave” es que Isabel Díaz Ayuso aspire a gobernar con la extremaderecha. El candidato de Ciudadanos a la presidencia de la Comunidad de Madrid, Edmundo Bal, ha calificado de error que Gabilondo y García se “levanten de la mesa”.
Vox se ha reafirmado en sus sospechas y ha celebrado la marcha de Iglesias. En el acto electoral, Santiago Abascal ha hablado de “montajes que algunos parecen estar orquestando” y han anunciado su intención de personarse como acusación popular en la investigación judicial de lo que describen como “supuestas amenazas”. La candidata popular, Isabel Díaz Ayuso, ha condenado la violencia, ha lamentado la confrontación y ha mantenido que “no puede ser que quienes provocan la violencia se hagan los ofendidos” y que tampoco, que haya políticos que pretendan “blanquear el entorno político de ETA”.