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El escalador Alain Robert ha escalado, a sus 61 años, un rascacielos de 217 metros en Manila para mostrar su apoyo a Filipinas. Sin arnés ni cuerdas, el francés escaló tranquilamente el edificio de 47 plantas de GT Capital, considerado el décimo edificio más alto de Manila, y luego descendió a la acera, donde fue arrestado por la policía. No obstante, Robert ha explicado que está acostumbrado a esto al escalar edificios, ya que no suele pedir permiso previamente. "Sé que hay tensión en el mar de Filipinas y solo quiero recordar que el mar y las islas pertenecen a esta y a nadie más", ha subrayado el escalador, quien se ha fracturado varias veces los huesos por caídas de hasta 15 metros. Manila y China mantienen un conflicto por la soberanía de varias islas y atolones en el mar de China Meridional, que Pekín reclama casi en su totalidad. 

Robert comenzó a escalar edificios y monumentos en los años 1990, pero saltó a la fama mundial en 2011 tras conquistar el edificio más alto del mundo, el Burj Khalifa de Dubái (Emiratos Árabes Unidos). A lo largo de su trayectoria, ha escalado más de un centenar de edificios y monumentos de todo el mundo, entre ellos el Empire State de Nueva York o la torre Taipéi 101 en Taiwán.

Pekín acoge la Asamblea Popular Nacional, el principal evento político del año. Se ha hablado de varias cuestiones, algunas de ellas económicas, como fijar el objetivo de crecimiento este 2024 en el 5%. Ricardo Santamaría es Director de Riesgo País y Gestión de Deuda de CESCE considera que se observan signos del debilitamiento del modelo de crecimiento chino.

En plena campaña visitamos la CPAC, la que presume ser la mayor conferencia de políticos conservadores del mundo y este año es un escaparate del expresidente Donald Trump. A los asistentes les gusta su mensaje proteccionista: "Estados Unidos primero" y su promesa de cerrar la frontera. No les preocupan los juicios que tienen pendientes. Lo votarán aunque lo condenen a la cárcel.

Aquí no hay rastro de Nikki Haley. En dos meses, Trump le ha ganado la batalla en el corazón del país, en las granjas de Iowa y las fábricas de Michigan, en estados claves del este y del oeste y en Carolina del Sur. Trump ha abatido a Haley en su propia casa, en el estado donde fue gobernadora. A sus votantes les gusta que no es Donald Trump, algunos creen que solo ella puede unir al país y más posibilidades de ganar en las generales, porque también la apoyan votantes independientes.

Los seguidores de Haley añoran el antiguo Partido Republicano, pero Trump ha revolucionado ese partido.

FOTO: AP Photo/Alex Brandon

Entre estrictos controles de seguridad, los 3.000 legisladores de la Asamblea Popular Nacional se dan cita en su sesión anual para validar la ya decidida hoja de ruta política del gigante asiático para 2024. Entre los presentes, periodistas de distintos países del sur global se dan cita en un país que trata de impulsar su imagen internacional ante su creciente tensión con Taiwán.

Según datos de Unicef, 4 de cada 10 niños, niñas y adolescentes sufren acoso escolar en Bolivia. El 14 % no denuncia, en parte, por miedo a los adultos. No es solo bullying, la violencia está normalizada en las escuelas bolivianas. Se tolera o justifica el castigo corporal, una práctica común en las familias y entre profesores. Visitamos la Unidad Educativa Juan Hershel C en el barrio de Obrajes en la ciudad de La Paz. Es una de las escuelas en donde UNICEF y la organización EDUCO llevan a cabo el proyecto "Escuelas constructoras de paz y bienestar" para prevenir la violencia escolar. Un reportaje de Minerva Oso.

A diario, familias gazatíes desesperadas esperan a los camiones de ayuda por algo de comida. Al menos una veintena de niños han muerto por desnutrición en los últimos días. La situación más grave se encuentra al norte de la Franja de Gaza, donde las ONGs han tenido que suspender la ayuda humanitaria, en un momento donde la ONU advierte de riesgo de hambruna entre los más pequeños.

La región turkana, en Kenia, es una zona extremadamente pobre y rural donde la gente sobrevive a duras penas. Las niñas son, tradicionalmente, menos valoradas que los hombres y el matrimonio infantil es una solución común a la pobreza. Los padres creen que las niñas no tienen derecho a ir al colegio. Sin embargo, gracias a los voluntarios españoles de la Asociación Manyatta y a las Misioneras Sociales de la Iglesia, algunas de estas pequeñas han podido estudiar y ahora están en la universidad o han comenzado una vida independiente y empoderada.