a presidenta de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, Nancy Pelosi, ha asegurado que China no aislará a Taiwán impidiendo que los funcionarios estadounidenses viajen allí. Pelosi ha hecho estas declaraciones en Tokio, en la última etapa de una gira por Asia marcada por su polémica visita a Taiwán que ha enfurecido a China, que reclama Taiwán y ha amenazado con anexionársela por la fuerza. Tal ha sido el enfado que los tropas chinas han iniciado cuatro días de maniobras, con fuego real, en la zona. Algo que el G7 y la Unión Europea, entre otros, han calificado de "sobreactuación innecesaria".
Pelosi, la primera presidenta de la Cámara de Representantes que visita Taiwán en 25 años, dijo el miércoles en Taipei que el compromiso de Estados Unidos con la democracia en la isla autónoma y en otros lugares "sigue siendo férreo". Pelosi y otros cinco miembros del Congreso llegaron a Tokio a última hora del jueves, tras visitar Singapur, Malasia, Taiwán y Corea del Sur. Un viaje que la Administración Biden desde un principio no vio apropiado aunque ha defendido que Pelosi era libre para hacer lo que creyese oportuno, y han insistido en que su postura sobre Taiwán no ha cambiado, sigue siendo la misma que hasta ahora.