Rusia y Estados Unidos han escenificado su desconfianza durante la visita que ha llevado hasta Moscú al secretario de Estado estadounidense, Rex Tillerson, que se ha reunido con su homólogo, Serguéi Lavrov, y con el presidente ruso, Vladímir Putin, con el conflicto en Siria y la crisis de Ucrania como principales asuntos de discordia. Al final de la jornada, tanto Tillerson como Lavrov han tratado de mostrar un cierto acercamiento, pero no han podido evitar señalar los profundos descuerdos entre Washington y Moscú.
El Gobierno de Estados Unidos considera que Cataluña es "un asunto interno" español y está "profundamente comprometido a mantener la relación con una España fuerte y unida", según ha afirmado en un comunicado la embajada estadounidense en Madrid. Este comunicado se difunde días después de que el presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, viajara a EE.UU. para hablar sobre el proceso secesionista catalán y de la visita de dos congresistas estadounidenses a Barcelona. Tras señalar que España y EE.UU. están unidos por la historia y los valores comunes que sustentan su asociación, la embajada dice que ambos países trabajan en estrecha colaboración en una serie de desafíos mundiales, incluyendo la promoción de la cooperación internacional, la paz y la seguridad y la prosperidad económica.
El presidente de Estados Unidos, que recientemente hablaba de su homólogo ruso como de su nuevo mejor amigo, ahora acusa a Moscú de encubrir al régimen sirio en el ataque químico en el que murieron más de 80 personas, incluidas niños. La Casa Blanca tiene pruebas de que en ese bombardeo se usó gas sarín.
El secretario de Estado norteamericano, Rex Tillerson, trata este miércoles con su colega ruso, Serguéi Lavrov, la escalada de la guerra en Siria en medio de las presiones occidentales para que el Kremlin de la espalda al régimen de Bachar al Asad. No está confirmado que el presidente Putin reciba al jefe de la diplomacia estadounidense en esta visita. Tillerson y el mandatario ruso ya mantuvieron en el pasado una relación afable, Putin condecoró a Tillerson cuando este era el director de la petrolera Exxon e invertía grandes cantidades en Rusia. Ahora llega en calidad de representante de EE.UU., con un conflicto diplomático recién desatado y con la delicada misión de negociar las posiciones en la guerra de Siria y el futuro de Al Asad.
El secretario de Estado de Estados Unidos, Rex Tillerson, ha aterrizado esta tarde en Moscú con un mensaje para el presidente ruso, Vladímir Putin: Rusia tiene que elegir entre apoyar a Estados Unidos respecto a Siria o seguir respaldado al régimen del presidente sirio Bachar al Asad.
La aerolínea pidió voluntarios para abandonar la nave en un vuelo de Chicago hasta Lousville, en Kentucky, para trasladar a cuatro de sus empleados, pero al no haber suficientes, seleccionó a cuatro pasajeros; uno de ellos se resistió y los agentes de seguridad reaccionaron sacándolo a la fuerza del avión. United Airlines ha pedido disculpas y se ha comprometido a solucionar la gestión del overbooking para que no se repitan casos como estos.
Pyongyang asegura que el país está listo para la guerra tras el despliegue de la Armada estadounidense en la península coreana. Con su habitual lenguaje, el régimen norcoreano advierte de consecuencias catastróficas si Washington continúa, dice, con sus provocaciones.