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Las generosas aportaciones de los ríos Daule y Babahoyo dan origen al Guayas, la anchísima ría que nace en Guayaquil y desemboca, sesenta kilómetros aguas abajo, en el Pacífico. En su margen derecha late el principal núcleo de población de Ecuador, su capital económica; es también la ciudad natal de Naíza, nombre artístico de la cantante Nicole Pernigotti. Al compás de éxitos como 'TBT', 'Perdóname' o '120', visitamos algunos de los lugares más emblemáticos de la urbe: desde el Cerro del Carmen hasta el Cerro Santa Ana, pasando por renovadas zonas de ocio como la calle Panamá o el Malecón 2000. En nuestro paseo escuchamos al cantante Giancarlo Alfanno, que recuerda una feliz visita compartida con su buena amiga Naíza. Además, el historiador Melvin Hoyos y el guía oficial Eddie Meneses nos invitan a descubrir importantes lugares como el Parque Seminario, la catedral o el Palacio Municipal. También hacemos una parada en el Museo Antropológico y de Arte Contemporáneo (MAAC), donde su director, Hugo Calle, propone descubrir una exposición permanente titulada 'Los 10.000 años del antiguo Ecuador'. Antes de abandonar la capital de la provincia del Guayas conocemos el contiguo municipio de Samborondón y nos detenemos en el Jardín Botánico de Guayaquil para vivir un momento tranquilo y enriquecedor.

Desde 2015, los pescadores gaditanos sufren la invasión del alga asiática, por la que ven reducidas sus capturas hasta el punto de no poder salir a faenar. Dicen que las ayudas recibidas son insuficientes y que la solución podría estar en modificar las cuotas de pesca de especies como el atún.

Las temperaturas récord de este verano no sólo se están registrando en tierra firme, sino también en el mar. En concreto, el pasado día 12 de agosto, la boya de Cabo de Gata registró 28,16 grados centígrados en el Mediterráneo, lo que supone un récord absoluto desde que se iniciaron los registros en 2001.

Es muy revelador que la palabra que abre cualquier conversación en fiyiano sea bula: vida. El saludo nacional es una invitación a la alegría, una luminosa manera de interactuar incluso con desconocidos. Las gentes de la República de Fiyi son de una amabilidad difícil de entender para alguien llegado de nuestras latitudes, una hospitalidad nada impostada. Se dice que los pobladores de esta nación mestiza son los más felices del mundo, en buena parte por el escenario que habitan, una sucesión de hermosas y fértiles islas tropicales. Nuestro viaje sonoro por el archipiélago cubre las tres principales –Viti Levu, Vanua Levu y Taveuni–, sin descuidar otras islitas encantadoras como las Mamanuca o las Yasawa. Nos acompañan los profesionales del turismo Juan Salvador MartínezXiaoxi SongPedro Montero y Begoña Palmero, que han vivido varios años en el país. Además surcamos esta región del Pacífico Sur tras la estela del navegante y entrenador de vela Pato Jamardo, conocemos el deporte nacional con el jugador de rugby Javi Martín y recorremos los caminos de Fiyi en bicicleta acompañados de Emilie Poudroux, que ha pasado medio año pedaleando entre playas, palmeras y montañas.

La velocidad a la que se está produciendo el cambio climático en nuestro planeta tiene alarmados a los científicos. En Fuengirola, científicos del Instituto Oceanográfico Español constatan que, en solo treinta años, el nivel y la temperatura del Mediterráneo han aumentado de forma exponencial.

El cambio climático suma un nuevo síntoma este verano a nuestro país. El aumento de las temperaturas en los mares ha provocado la llegada a nuestras playas de la carabela portuguesa, una especie que vive en aguas cálidas, tropicales y subtropicales. Por ejemplo, en Euskadi se han detectado varios ejemplares y han tenido que cerrarse algunas playas. Aunque es un fenómeno que está caracterizado por varios factores, uno de los principales es el calentamiento de las aguas, según explica en Las Mañanas de RNE Elena Mauriño, bióloga del departamento del Mediterráneo/Medusas del Oceanogràfic de Valencia: "En el caso del Cantábrico se están registrando máximo históricos y esto hace un ambiente mucho más agradable para estas carabelas", apunta la bióloga. Este fenómeno es cada vez más frecuente en muchas costas de España, no solo en el Cantábrico porque en el Mediterráneo tampoco es común, pero están apareciendo: "Tenemos que esperar y ver cómo va siendo la evolución. No es un hecho puntual, porque no es la primera vez que estás apareciendo". No es una medusa, aunque pertenece al mismo gurpo y cuando la vemos nos lo pueda parecer: "La carabela portuguesa es un sifonóforo. Esta especie se caracteriza porque no es solo un individuo, es un organismo colonial, está formado por muchos individuos especializados en realizar diferentes funciones", explica Mauriño. Su veneno es más peligroso que el de las medusas, más urticante y provoca una quemazón mucho mayor: "No es mortal en la mayoría de los casos, aunque siempre hay excepciones. La característica es que estos animales tienen el cuerpo cubierto por una células urticantes que disparan como un aguijón que tiene unastoxicanas que pueden ser neurotóxicas o cardiotóxicas", apunta. Elena Mauriño explica que lo más importante si vemos una carabela portuguesa es nadar lejos de ella, no tocarla y salir del agua, aunque también aconseja evitar bañarse en la zona los días siguientes: "En muchas ocasiones se desprenden fragmentos de tentáculos -que pueden medir entre 10 y 20 metros- y también tienen células urticantes. Un pequeño trocito nos podría causar reacción". No solo influye el calentamiento de nuestras aguas, apunta la bióloga, sino la acción del ser humano, por ejemplo la sobrepesca o el vertido de contaminantes provoca una reducción de la biodiversidad de grande depredadores, que se encargan de alimentarse de estos animales. "Tanto las medusas como las carabelas son muy importantes en la ecología y el equilibrio de los ecosistemas marinos porque regulan la cadena trófica. Sirven de alimentos para otros grandes depredadores y se alimentan de placton."