Enlaces accesibilidad
arriba Ir arriba

Conferencia en Berlín para la reconstrucción de Ucrania. Nuestros enviados especiales a Ucrania, María Eulate y Luis Montero, hablan con ciudadanos sobre las consecuencias económicas del conflicto. Rishi Sunak ya es primer ministro del Reino Unido y empieza a conformar su gabinete. Primer discurso en el Parlamento de la nueva primera ministra italiana, Giorgia Meloni. Varios palestinos muertos en Nablus en una operación militar israelí. Arrancan negociaciones en Sudáfrica para un alto el fuego en Tigray. Entrevista sobre la salud mental de los yemeníes con Médicos Sin Fronteras.

Esther Casas, asesora principal en materia de VIH y Tuberculosis del Departamento Médico de Médicos Sin Fronteras en Sudáfrica, nos cuenta cómo se necesita más dinero para el fondo con el que se combaten estas enfermedades en Sudáfrica.

Encuentro entre Vladimir Putin y Xi Jinping en Uzbekistán. Ursula Von der Leyen visita Kiev. Se desvelan vídeos sobre el atentado de Niza de julio de 2016. Entrevista con MSF en torno a la lucha contra la tuberculosis y el SIDA en Sudáfrica. Repasamos los resultados electorales en Suecia y las opciones para formar gobierno, y nos fijamos en cómo Hungría empieza a ser considerado un país no plenamente democrático por sus socios de la Unión Europea.

La muerte de cinco palestinos en Cisjordania en sólo veinticuatro horas y la ola de atentados sufridos por Israel en la última semana disparan la tensión en la zona. Viajamos a Járkov y Leópolis en Ucrania para hablar de la situación, de cómo se organizan los hospitales en las zonas que están siendo bombardeadas y de cómo se están investigado los presuntos crímenes de guerra sobre el terreno. Seguimos pendientes de las inundaciones en Sudáfrica y analizamos la crisis política y económica en Perú, que vuelve a poner al presidente Pedro Castillo contra las cuerdas.
 

El presidente de los EEUU, Joe Biden, ha anunciado esta misma tarde más restricciones comerciales contra Moscú. El G7 y la Unión Europea van a adoptar medidas similares como respuesta a la invasión rusa. Hablamos con María Eulate, enviada especial a Leópolis, en el oeste de Ucrania, sobre los ataques en esta parte del país. Además, charlamos con nuestro enviado especial a Sudáfrica, Santiago Barnuevo, sobre desigualdad, la pandemia y el SIDA.

COVID-19, el otro enemigo de Sudáfrica (III)

Vivir con VIH en tiempos de COVID-19

  • Sudáfrica es el país del mundo con mayor prevalencia de VIH en los adultos
  • Desde hace 15 años, tiene el sistema más completo para que los pacientes lleven una vida lo más normal posible

Sudáfrica es el país del mundo con mayor prevalencia de VIH en adultos. Desde hace 15 años, tiene el sistema más completo para que los pacientes puedan llevar una vida lo más normal posible. Durante la primera ola de la pandemia, sin embargo, se temió lo peor. Lo explica Eric Goemare, histórico director de Médicos Sin Fronteras en Sudáfrica que puso en marcha los programas pioneros en el país: “Cuando empezó la pandemia, entramos en pánico. Pensamos que las personas inmunodeprimidas iban a morir en masa”. Andile se enteró de que era positivo hace 17 años: "Me costó mucho ir a hacerme la prueba y cuando di positivo, me hundí. Intenté ahorcarme pero mi hija pequeña me vio y me ayudó". Hoy, es mediador de la Treatment Action Campaign y reconoce que, con la llegada del COVID-19, ha empeorado la atención: “La gente que vive con VIH y SIDA ha sufrido mucho durante la pandemia. Porque el gobierno cambió el foco hacia la covid-19 con todos los recursos y se dejó de lado la atención no solo al VIH, también a la tuberculosis u otras enfermedades". 

Informa Santiago Barnuevo, enviado especial a Ciuda del Cabo (Sudáfrica)

Este 11 de marzo de 2022 se cumplen dos años desde que la Organización Mundial de la salud declaró como pandemia la COVID-19. Seis millones de personas han fallecido por esta patología en este tiempo en todo el planeta. Uno de los países más afectados ha sido Sudáfrica, donde se secuenció la variente Ómicron, la cepa más contagiosa de las conocidas hasta ahora. En la capital legislativa del país, Ciudad del Cabo, se encuentra nuestro compañero Santiago Barnuevo.
 

El 11 de marzo se cumplen dos años desde que la Organización Mundial de la Salud declaró la COVID-19 como una pandemia. Desde entonces, Sudáfrica ha sido uno de los países más afectados por el virus. Allí, el confinamiento dejó sin trabajo a miles de personas en una situación crítica. Ante esta situación, las comunidades reaccionaron formando redes de apoyo vecinal.

Sindiswa se levanta todos los días a las cinco de la mañana para dar de comer a un centenar de niños y niñas de su barrio, la comunidad de Imizano Yethu, a apenas 20 minutos del centro de Ciudad del Cabo. “De repente, casi todos los vecinos perdieron su trabajo por el confinamiento y las familias no tenían qué dar de comer a sus hijos”, recuerda a las puertas de su casa. Aunque la gran embestida de la pandemia ya ha pasado, dice que seguirá haciéndolo durante toda su vida. Acciones como las de Sindiswa son ejemplo del ubuntu, una forma de vida y una idea de pertenencia comunitaria que se resume en algo así como “Yo soy porque somos”.

InformaSantiago Barnuevo, enviado especial de RNE a Ciudad del Cabo (Sudáfrica).

Se cumplen dos años desde que la Organización Mundial de la Salud declarara a la Covid-19 como una pandemia. En este tiempo se han registrado 6 millones de muertes y los efectos en las economías de todo el mundo aun se nota. Sudáfrica es uno de los países donde el impacto fue mayor al principio y donde la pandemia ha tocado de lleno a todo el tejido social.

Nuestro enviado especial a Ciudad del Cabo, Santiago Barnuevo, ha entrevistado a Marcela Guerrero una colombiana y activista social afincada en esa ciudad desde 2006. Ella nos cuenta que en una pandemia, las fracturas sociales se notan aun más. Guerrero asegura que: “El COVID tuvo algo especial porque destapó la venda que tenía la ciudad”. El comercio informal del que dependen tantas personas tanto consumidoras como trabajadoras, se vio afectado también tras la pandemia. Según Marcela: “Las cosas tras dos años de pandemia se han recuperado en cierta manera, pero nos falta muchísimo para apoyar la economía informal”.

Sudáfrica ve con alivio su situación sanitaria después de haber sido el epicentro de la variante ómicron. En el segundo aniversario de la declaración de la pandemia, vemos cómo está el país africano tras una crisis, no solo sanitaria, sino también económica e institucional.

La pandemia ha dejado un rastro enorme de pobreza en un país que ya soportaba tasas de desigualdad muy grandes: 1 de cada 6 sudafricanos acabó el año pasando hambre según datos oficiales, ante una economía que no ha conseguido despertar tras el confinamiento. El gobierno ha prometido paquetes de estímulos que tardan en llegar. Esta situación ha provocado que a penas un 22% de los sudafricanos confíen hoy en su gobierno. Una crisis institucional que vive el país desde que Jacob Zuma tuvo que dejar la presidencia por corrupción: muchos se enriquecieron, mientras otras personas morían en las camas de hospital. Aseguran que la corrupción se ha infiltrado en todos los niveles de la administración y es necesario que se hagan reformas inmediatas para evitar una nueva fractura social.

Informa Santiago Barnuevo, enviado especial a Ciudad del Cabo

El confinamiento derivado de la pandemia del COVID-19 dejó sin trabajo y en una situación crítrica a miles de personas en Sudáfrica. Como respuesta, las comunidades se movilizaron en redes de apoyo entre vecinos. Por las calles del barrio de Langa, pedalea desde hace años Mzikhona Mgedle, un joven que ha hecho de su pasión por la bicicleta el motor de su vida. Durante el confinamiento, aportó bicicletas a las cocinas comunitarias para llevar la comida a domicilio para discapacitados o enfermos. Ahora, regenteel Langa Biking Hub, un negocio con el que arregla y vende bicicletas a precios asequibles.

Informa Santiago Barnuevo, enviado especial de RNE a Ciudad del Cabo (Sudáfrica).