El Parlamento Europeo ha dado su visto bueno a la nueva Comisión Europea de Ursula Von der Leyen. La eurocámara le ha dado 38 votos positivos más que a su predecesor, Jean-Claude Juncker.
Su equipo de comisarios también ha sido aprobado con los votos de los grupos popular, socialdemócrata y liberales.
Margaritis Schinas, el designado como nuevo vicepresidente de la Comisión Europea y encargado de la cartera de Promoción del Modo de Vida Europeo ha pasado en esta jornada en la que se espera que se apruebe el nuevo ejecutivo europeo por las Mañanas de RNE con Íñigo Alfonso. El político griego ha repasado cuál va a ser su papel en esta cartera, que ha tenido que cambiar su designación por el rechazo de algunos socios europeos a su primer nombre. Sobre esto, Schinas ha asegurado que “el Europarlamento consideró más positiva esta designación ya que la protección algunos la perciben como agresión”.
Sobre el modo de vida europeo, Schinas ha dicho que “Europa es un faro de luz en un mundo que cada vez se hace más oscuro”. El nuevo comisario designado ha dicho que “Europa es democracia, protegemos a las minorías, el papel de la mujer está grarantizado, tenemos sistemas universales de sanidad, educación, etc”. Partes de todo esto se pueden encontrar en otras partes del planeta, ha dicho Schinas, pero junto, “solo en Europa”.
No es una imagen habital la de la Puerta de Brandenburgo colapsada por miles de tractores de agricultores que han venido de toda Alemania para protestar por las medidas del gobierno que quieren imponer una agricultura más limpia. Los agricultores quieren dejar claro en el corazón de Berlín que ellos producen la mayoría de los alimentos que los alemanes consumen a bajo precio. Y eso se puede acabar, dicen.
El comisario europeo de Asuntos Económicos y Monetarios, Pierre Moscovici, recomienda a los países con una "deuda pública alta" como España, Portugal y Bélgica, que apliquen "medidas presupuestarias prudentes" e intenten potenciar el crecimiento.
El abogado general del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) ha dado la razón este martes al exvicepresidente catalán Oriol Junqueras al considerar que se debió reconocer al líder de ERC como eurodiputado y por tanto su inmunidad parlamentaria desde el momento en el que se proclamaron oficiales los resultados de las elecciones de mayo sin que fuera necesario que prometiera o jurara la Constitución como exige la ley española a las personas electas. Un requisito que Junqueras no pudo cumplir porque el Supremo no autorizó su salida de prisión para hacerlo.
El abogado Genal del Tribunal Superior de Justicia de la Unión Europea ha dado la razón a la defensa de Oriol Junqueras y cree que tiene inmunidad parlamentaria aunque no haya recogido el acta de eurodiputado. Entiende que es parlamentario desde que fue elegido en las urnas. Para el Catedrático de Derecho constitucional de la Universidad de Sevilla, Fernando Álvarez Ossorio, si el Tribunal europeo confirma esta opinión Carles Puigdemont y Toni Comin también podrían tener inmunidad. En el caso de Junqueras ya no serviría porque está juzgado y condenado a trece años de cárcel por sedición y malversación.
El abogado general del Tribunal de Justicia de la Unión Europea da la razón a la defensa del presidente de Esquerra Republicana de Catalunya, Oriol Junqueras, en su petición de inmunidad parlamentaria.
No se trata de la sentencia, sino de las conclusiones del abogado general, que marcan eso sí el camino de lo que suele luego dictaminar el tribunal. El letrado general dice que uno adquiere la condición de eurodiputado una vez que es elegido por los ciudadanos, y que no hay que esperar a ninguna formalidad posterior.
Esto difiere con lo que defienden el estado español y las instituciones europeas, que dicen que hasta que Oriol Junqueras o cualquier otro eurodiputado no tome posesión de su actano tiene derecho a la inmunidad a la que se accede una vez que uno es diputado en la cámara europea. De momento es solo la postura del abogado general. La sentencia se espera para dentro de unos meses.
Los únicos en los que hay alianzas con partidos de ultraderecha son Estonia y Bulgaria. Y entre los que no lo tienen, Reino Unido y Portugal, donde se gobierna con ejecutivos monocolor gracias a apoyos externos.
La extrema derecha en la Unión Europea se encuentra dentro de ocho ejecutivos y es una presencia permanente en la política, pero con matices diferentes: más o menos nacionalista, más o menos xenófoba y más o menos antisemita.
En Hungría y Polonia los ultranacionalistas gobiernan, aunque no se consideran a sí mismos de extrema derecha. En Italia y en Austria los extremistas de derecha eran socios de gobierno hasta hace unos meses. En Alemania son el primer partido de la oposición, con más de un 20% en las últimas elecciones generales. En Francia, en las últimas elecciones presidenciales, Marine Le Pen consiguió uno de cada tres votos.
Su influencia se nota sobre todo en políticas de inmigración cada vez más restricitvas, en culpar a los inmigrantes del mal funcionamiento de los servicios sociales y en un acento en las peculiaridades nacionales sobre las europeas.